Hace falta bastante imaginación para comprender el tamaño real que tiene esta viola despampanante. Pero, técnicamente, mide 10 micrones (un micrón equivale a una millonésima parte de un metro).
La llaman "nanoguitarra", tiene seis cuerdas que miden 100 átomos de ancho. No es la primera que se construye (ya en 1997 inventaron una similar en la Universidad de Cornell, EE.UU.), pero esta, a diferencia de la primera, fue tocada. No con una nanomano, sino con un micro láser.
¿Alguien oyó algo? Nones: ni siquiera los micrófonos más sensibles pueden captar el sonido: las cuerdas vibran en frecuencias 17 octavas más altas que las de una guitarra real.
Sólo una computadora puede calcular el rastro acústico del sonido y contar el número de reflejos del láser usado para "tocar" las cuerdas.
La luz del láser golpea a las "cuerdas" que crean patrones de interferencia en la luz. Este efecto es detectado y convertido en notas audibles. Así surgen los tonos.
La miniguitarrita fue creada por los doctores Dustin W. Carr y Harold G. Craighead, y la construyeron para llamar la atención sobre la nanotecnología. Y vaya si lo consiguieron.
Fuente: DV