familiares o amigos? Se caracteriza por producir una sensación de quemazón desde la
boca del estómago hasta el pecho y la garganta.
Generalmente lo tratamos con un antiácido sin saber que la solución es temporal y que, a
la larga y tras un uso habitual, puede provocar diarrea, estreñimiento y debilidad muscular.
Por ello, lo mejor es prevenir. Tomá nota:
- Durante la comida, masticá y comé despacio. Las prisas en la mesa pueden provocar
malas digestiones.
- Un exceso de grasa en el abdomen aumenta la presión en el estómago provocando acidez
ya que el ácido busca al esófago para liberarse. Por tanto, controla tu peso.
- Evitá las comidas copiosas.
- Durante la comida, moderá el consumo de alcohol, bebidas gaseosas, té y alimentos
como la cebolla o el ajo.
- Proponete dejar de fumar. El tabaco facilita la entrada del ácido en el esófago al debilitar el
esfínter inferior que lo contrae.
- Evitá flexionar el tronco después de comer.