Con la unión de los sindicatos obreros del sector de la industria del vidrio, se instauró en 1944 el 11 de junio como el Día del Vidriero. El oficio conjuga la minuciosidad del trabajo del artesano con las más estrictas medidas de seguridad de la actividad industrial.
En el decálogo del vidriero, se incluye la necesidad de remarcar que “lo principal es trabajar con mucha seguridad, responsabilidad, y material de calidad.
De acuerdo al artículo 34° de la convención colectiva de trabajo que rige para la Industria del Vidrio y Afines, el 11 de junio quedó establecido como el “Día del Vidriero”.
INDISPENSABLE
De los elementos de fabricación humana, el vidrio es uno de los más indispensables. Aunque sus principios básicos de fabricación permanecen inamovibles a lo largo de la historia, la creciente tecnología incorpora características nuevas al elemento.
Existen diferentes razones por las cuales se elige un elemento de vidrio para distintos usos en la vida diaria. La calidad por su resistencia al desgaste, la apariencia y transparencia que implican agrado desde el punto de vista higiénico y estético. La preservación de la calidad sanitaria de los alimentos, bebidas, medicamentos, que no es afectada por el traspaso de sustancias provenientes del envase que los pudieran contaminar.
VARIANTES
El vidrio tiene diferentes variantes: float (cristal plano); cristal reflectivo (espejados, que reduce las molestias por una excesiva luminosidad); espejos (decorativo, por excelencia); y el doble vidriado hermético (DVH), que tiene diferentes niveles de aislamiento, acústica, térmica y control de radiación solar); laminados (para seguridad de las personas y protección de bienes); antibalas y policarbonatos (para cubierta, ventanas y taponamiento).