Es un pueblo en China donde mas que una moda tienen una tradición con el pelo de las mujeres. Solo se lo cortan una vez en la vida, a los dieciséis años, y luego ya lo dejan crecer a lo loco. Uno de sus secretos es lavarse el cabello con un champú casero de arroz. La mayor parte del año lo llevan recogido, y antiguamente si un hombre le veía el pelo suelto a una mujer tenia que vivir con ella varios años, aunque tuviera marido. Ahora ya esta la cosa mas suave y las dejan incluso fotografiarse