Tratar de terminar un proyecto o adoptar un hábito nuevo y positivo puede causarme estrés. Quizás hasta desee “tirar la toalla”. Mas, para permanecer motivado, recuerdo: ¡Con la práctica se logra la perfección! O mejor todavía: ¡La práctica nos hace progresar!
En vez de tratar de ser perfecto, practico avanzar en la dirección correcta. Cada etapa de progreso es buena, aun cuando no logre la perfección. La afirmación: La práctica nos hace progresar, me mantiene motivado y me da la energía que necesito para seguir adelante. Continúo dando pasos pequeños, pero significativos, sin estrés o desánimo, y mi sentido de logro se acrecienta. ¡La práctica realmente nos hace progresar!