Muriera el amanecer
y se callara la alondra
si te dejo de querer
como yo te quiero ahora.
No es cuestión de merecer
ser feliz o hallar mejora,
es mi alma, al florecer
cuando tú la enamoras
en cualquier atardecer
al calor del sol, que adora
este amor que no es de ayer
porque nace cada aurora.
AMANECER, TU ESPOSA..