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General: Caminar sin prisas por la vida
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Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: margar  (Mensaje original) Enviado: 15/02/2014 23:45

 

Caminar sin prisas por la vida
  
Las personas que logran hacer más sin llegar a cansarse
son aquellasque han aprendido a cambiar de ritmo
según la necesidad y ocasión.
  A veces es necesario darnos prisa, pero otras veces hay
que saber tomarnos las cosas con tranquilidad

e ir a un ritmo relajado.

Hay muchas cosas que nos perdemos por no vivir al ritmo

adecuado.No cambiar nunca nuestro ritmo de vida

resulta matador.
Algunas actividades deberíamos saber tomarlas más relajadamente,

pero igualmente hay otras actividades en las que debiéramos ser

más aceleradas, resueltas y resolutivas. 

 Por ejemplo, puede sucedernos

 que caminemos y hablemos con demasiada rapidez y por otra parte

 pensemos y trabajemos con lentitud excesiva.

Por ejemplo, quienes han estudiado la nuestra habilidad mental

en la lectura y comprensión de lo que se lee, señalan

que la mayoría de las veces es mejor leer con cierta rapidez,

pues la mente tiende a

distraerse cuando se lee muy despacio.

Quizás pueda convenirle a algunas

 personas cambiar su ritmo de la lectura y, en vez de hacer

 de ella un examen lento y detenido, dedicarle una concentración

enérgica y ágil de la atención.

Como en todo, no existe un ritmo único que sea apropiado

para todo lo que se lee. Algunos libros se leen mejor

 corriendo con la vista y otros, como por ejemplo de Cervantes,

 Shakespeare o Tolstoi, con enamorado sosiego.

Me cuenta una amiga que hace ya muchos años, al comprar un

 nuevo automóvil, resolvió seguir escrupulosamente

las instrucciones que se daban entonces,

de no ir más de 45 kilómetros por hora

durante los primeros 800.

Se quedó estupefacta al comprobar la diferencia que

 unos pocos kilómetros por hora significaban en satisfacciones y

 sensaciones personales que hasta entonces le eran desconocidas. 

 Hasta que disminuyó la velocidad nunca se había percatado

 del viejo árbol de magnolia en el camino a la estación.

La copa del árbol estaba deshecha por los muchos años

 de tormentas, le faltaban varias ramas, pero sobrevivía

con tanta fuerza y altivez que se avergonzó por los instantes

en que se desalentaba por pequeñeces de la vida.

Hay una catedral de árboles y rocas a un lado

 de la carretera a poco más de un kilómetro de donde vivo, y dan

una sensación de calma y de poderío.

Sólo mirar los árboles y dedicarles un pensamiento

cuando paso junto a ellos me bastan para experimentar

 paz interior. Siempre han estado ahí, y hasta que no ralentizas tu

 marcha ni te percatas de todo cuanto te estás perdiendo por ir tan

aceleradamente por la carretera.

La mayoría devoramos la comida y así nos perdemos

la mitad del placer que nos ofrece.

Yo solía comer sin masticar.

 Un día decidí hacer como si reprodujese una película

 en cámara lenta y por primera vez tomé el sabor

 a manjares que toda la vida

había estado comiendo inconscientemente, por así decirlo.

Recientemente he descubierto la enorme diferencia

que hace el saber cambiar de ritmo en la respiración.

He comprobado que cuando

estoy fatigada y en tensión nerviosa, puedo descansar

 e incluso dormir si disminuyo el número de aspiraciones y

aumento el de espiraciones.

Es una práctica que además de darme beneficios físicos inmediatos,

me proporciona una grata sensación de dominio de mí misma.

Te recomiendo probarlo, verás que cuando respiras lentamente

para distender el organismo o cuando respiras rápidamente para

estimularlo, se despierta toda una seria de sensaciones

y de músculos

que no conocías cuando dejabas la respiración entregada por

completo al inconsciente.

Otra oportunidad de un saludable cambio de ritmo en la vida

se me presenta los domingos en la iglesia.

 Ahí se puede pensar en las

 cosas realmente importantes, en vez de las meramente urgentes.

En las tradicionales cadencias de los textos litúrgicos,

 en las parábolas del evangelio y en los himnos, encuentro

 una refrescante novedad de ritmo,

 un reposo renovador después del diario ajetreo de la televisión,

 la radio y el comercio.

Y por más que mis pensamientos divaguen y se alejen

 de lo que está diciendo el predicador, mi mente y mi corazón

 se dirigen al mandato supremo que oyó el salmista:

“Guarda silencio y sabe que yo soy Dios”.

Además, me agrada la sensación de liberarme de las ataduras del

tiempo que me da la Biblia. Cuando David exclama en un momento

 de visión directa:

“Porque mil años son ante tus ojos como el día de

ayer que ya pasó, y como una de las vigilias de la noche,”

 no me parece que mida el tiempo

 con nuestra vara.

¿No está demostrándonos acaso que lo que llamamos

 tiempo es sólo una ilusión creada para su conveniencia

 por el hombre?

Así pues, también el alma puede beneficiarse del cambio de ritmo.

Hacer más lento el andar del cuerpo puede muy bien

 hacer más rápida la percepción de lo que realmente importa.

No descuidemos nunca la oportunidad de cambiar el ritmo de

nuestra vida para dar al alma la posibilidad de vivir.

.

Conclusiones:

Es muy saber cambiar de ritmo en la vida, adaptarse a la necesidad,

y probar así nuevas experiencias que el cambio de ritmo nos otorga.
Es muy importante caminar lento, disfrutar de las

grandes maravillas

que tenemos en nuestro entorno, con las prisas de nuestras vidas

nos perdemos la mitad de las cosas que realmente son importantes.

Vivimos tan de prisa que a veces olvidamos detenernos

para disfrutar los detalles de la felicidad.

 Pensamos que los hijos nunca van a crecer,

o que nuestros padres nunca van a morir, y hasta tenemos por poco

 el amor que nuestra pareja nos regala y demandamos más…

 La vida está llena de felicidad, pero vivimos tan afanados

por el mañana que se nos olvidan los minutos del hoy.
Disfruta de la vida, no vivas tan apresuradamente, que a ese ritmo

frenético te pierdes todo lo maravilloso que puede ser el mundo

si sólo te relajases un poco para mirarlo con buenos ojos.

Con amor
Shoshan

 



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Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: flaquita Enviado: 16/02/2014 05:32


 
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