ELLAS...(TÚ Y YO)
Escúchalas, nos siguen como queriendo abrazarnos,
oscuras, tan rápidas o lentas como nosotros;
tomadas de la mano, se abrazan y se besan
porque saben que habrá de llegar la distancia
para separarlas.
Míralas, se fusionan, lucen felices
como asistentes a un concierto;
sus orillas se difuminan en la penumbra.
Estoicas, danzan entre las sábanas,
los vapores del amor las convencen
de entregarse, sin que otra cosa
importe por el tiempo que les toca
de encontrarse y fundirse en un espectro.
No están inanimadas, sólo reposan.
Su gran destino las envuelve,
se delinea la una a la otra con la mirada
y el tiempo detenido en ellas
las ha sorprendido silenciando
el adiós, y el acompasado rugido de las horas.
Hay un cierto dejo de tristeza,
en ese soltarse.
Así como el barco del hombre,
cuando suelta sus amarras
para zarpar hacia aguas desconocidas;
añorando aquel puerto ya lejano,
convencido de su regreso,
pero expectante y movido
a navegar hacia el horizonte,
quizás con más avidez por lo que vendrá.
CelesteLuz©Todos los derechos reservados 2012.