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General: P. Semillitas. Crecer en la oración...
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Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: Casimiro López Cano  (Mensaje original) Enviado: 16/03/2014 13:16
Alabado sea Jesucristo…
El centro de ese relato complejo, llamado tradicionalmente “La transfiguración de Jesús”, lo ocupa una Voz que viene de una extraña “nube luminosa”, símbolo que se emplea en la Biblia para hablar de la presencia siempre misteriosa de Dios que se nos manifiesta y, al mismo tiempo, se nos oculta.
La Voz dice estas palabras: “Este es mi Hijo, el amado, mi predilecto. Escuchadlo”. En otros tiempos, Dios había revelado su voluntad por medio de los “diez mandatos” de la Ley. Ahora la voluntad de Dios se resume y concreta en un solo mandato: escuchad a Jesús. La escucha establece la verdadera relación entre los seguidores y Jesús.
Muchas personas solo conocen a Jesús de oídas. Su nombre les resulta, tal vez, familiar, pero lo que saben de él no va más allá de algunos recuerdos e impresiones de la infancia. Incluso, aunque se llamen cristianos, viven sin escuchar en su interior a Jesús. Y, sin esa experiencia, no es posible conocer su paz inconfundible ni su fuerza para alentar y sostener nuestra vida.
Cuando un creyente se detiene a escuchar en silencio a Jesús, en el interior de su conciencia, escucha siempre algo como esto: “No tengas miedo. Abandónate con toda sencillez en el misterio de Dios. Tu poca fe basta. No te inquietes. Si me escuchas, descubrirás que el amor de Dios consiste en estar siempre perdonándote. Y, si crees esto, tu vida cambiará. Conocerás la paz del corazón”.
En el libro del Apocalipsis se puede leer así: “Mira, estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la puerta, entraré en su casa”. Jesús llama a la puerta de cristianos y no cristianos. Le podemos abrir la puerta o lo podemos rechazar. Pero no es lo mismo vivir con Jesús que sin él. José Antonio Pagola

¡Buenos días!

Crecer en oración

La oración que haces al comenzar la jornada y al terminarla, es la expresión de tu amor y confianza en Dios. Entre estos dos momentos, si amas de verdad a Dios con toda el alma y con todas las fuerzas, como dice la Palabra, de alguna manera el recuerdo y la presencia del Señor te acompañarán en las variadas tareas de tu jornada. Un mensaje de la Reina de la Paz:

“¡Queridos hijos! Hoy quiero hacerles esta invitación: ¡oren, oren, oren!, en la oración, ustedes conocerán el gozo más grande y encontrarán la solución a cualquier situación difícil. Gracias por los progresos que hacen en la oración! Cada uno de ustedes es querido a mi corazón y agradezco a todos aquellos que han incrementado la oración en sus familias. Gracias por haber respondido a mi llamado!”

“La oración me salvó la vida. Sin ella estaría loco hace ya mucho tiempo. Si conseguí salvarme de la desesperación fue gracias a la oración” (M. Gandhi). “Sólo por la oración podemos alcanzar la completa y armoniosa unificación del cuerpo, mente y espíritu, que le da a la frágil constitución humana su fortaleza invencible” (A. Carrel). Toma una buena decisión.
Padre Natalio



Sagrado Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día más para adorarte y servirte. Hagamos como decía San Agustín:  Señor a Ti solo busco, a Ti solo amo y tuyo quiero ser. Mi único deseo es conocerte y amarte. (Sol 1,1,). La mies es mucha y pocos son los obreros para recogerla. Es la Palabra de Dios. Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo dibulgo cada día Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de que se propague la Fe, en el Sagrado Corazón de Jesús y suplico a todos los creyentes y no creyenes, que pidan al Señor Jesucristo en oración, que no haya más guerras ni hambre en el Mundo, ni atentados terroristas ni políticos de guante blanco y reine la Paz, así como el amor, en todos los rincones del Orbe. Así sea. Detente, el Sagrado Corazón de Jesús, está conmigo. Casimiro López.


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Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: flaquita Enviado: 16/03/2014 18:51

Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: Casimiro López Cano Enviado: 16/03/2014 19:15
ADELA. GRACIAS POR COMPARTIR TUS SABIAS LETRAS O POR LEER LAS MIAS. UN FUERTE ABRAZO.


 
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