Aun ausente
El dolor que tú me haces sentir...
Me gusta...
Saber que soy capaz de morir por ti,
Saber que aún ausente, te recuperaría donde quiera que estés,
Haciendo cadáveres inservibles a un lado
Sólo para verte a ti.
Encontrar lo vivo entre lo podrido
y saborearlo como si siempre hubiera sido mío.
Aún ausente en mi memoria resistiría,
resistiría la fuerza de mi pensamiento,
para no dejar de pensar en ti.
Y sabiendo que la mejor parte del día es el final,
comprendería que siendo tú, de mi vida el guía,
tal vez tu luz de despedida,
sea mejor que la luz de tu venida...
Aquella luz que incendió la mía,
será la misma luz que me mate en vida,
y cuando finalmente tu bella luz de atardecer haya terminado,
sé que me esperará otro día,
con tu triste luz de inicio a mi lado...
Aún ausente,
Aún sepultado,
Aún desterrado de mi memoria...
El ocaso siempre lleva al amanecer,
la alegría finalmente se convertirá en tristeza,
pero sé que después de eso,
la oscuridad de mi alma cobrará vida en ti...
Lo vivo entre lo podrido,
lo bello entre lo aborrecido...
¿Terminará algún día?
Colaboración de Paulina Valdez