Alabado sea
Jesucristo…
El mundo tiene que cambiar, y la civilización del amor,
anunciada y profetizada tantas veces por el santo Papa Juan Pablo II, tiene que
llegar. Pero no llegará si los católicos nos quedamos de brazos cruzados y con
la boca cerrada, pues es necesario que hagamos apostolado y que recemos mucho.
Pero a no creernos que nos faltan cualidades o medios
para el apostolado, porque si Dios se sirvió de doce pobres hombres, los Doce
Apóstoles, para fundar y propagar su Iglesia; tranquilamente se puede servir de
nosotros, que tal vez somos poca cosa, pero con la gracia y la ayuda de Dios
podemos hacer grandes obras para gloria de Dios y salvación de las almas.
No tengamos miedo de lanzarnos a la conquista del mundo
para Cristo, porque quien trabaja por Dios y por el Bien, es ayudado por la
Providencia divina y el triunfo es seguro.
Aprovechemos estos medios de comunicación modernos que
nos permiten llegar a miles de personas en contados minutos, y utilicémoslos
para el apostolado. Se envían tantas tonterías por email, ¿por qué no enviar
buenos mensajes, con enseñanzas cristianas, encendiendo la caridad en las
almas, para que sean muchos los que se contagien y sean también apóstoles?
Es cierto que el mundo está mal y que la noche ha
descendido sobre él, pero esto no es obstáculo para darnos por vencidos, sino
todo lo contrario, pues justamente la luz brilla en las tinieblas; y si somos
una luz en la oscuridad, iluminaremos a muchos, justamente por la gran tiniebla
de alrededor.
Debemos ser una luz en donde el Señor nos colocó, ya que
no es producto del azar que estemos exactamente en el lugar que estamos, sino
que el nuestro es un puesto estratégico y elegido por Dios, y lo que no hacemos
nosotros, nadie lo hará en lugar nuestro.
Pensemos un poco en ello. El Cielo vale la pena.
¡Buenos días!
...
El mono y la naranja
La concentración
es la capacidad de dirigir toda nuestra atención a un asunto determinado, abstrayéndonos
de cualquier otra cosa. Es necesario silenciar todo el pasado y el futuro,
desligarnos de preocupaciones y problemas. Fuera del momento presente no permitas
que nada más ocupe tu mente.
Un mono, sin dejar de rascarse, alzó una
naranja. No queriendo dejar su ocupación, tiró de la cáscara con los dientes,
pero le disgustó su amargura y buscó otro medio. Siempre rascándose, puso un
pie sobre la naranja, y con la otra mano empezó a pelarla. Pronto se cansó. Se
sentó entonces y apretó la naranja entre las rodillas, sacando con la mano
libre algo de la cáscara; pero la fruta resbaló y rodó por el suelo. Dejó de
rascarse, agarró fuerte la fruta con una mano, la peló con la otra en un
minuto, la partió y la comió. Después de dar dos piruetas, empezó a rascarse
otra vez, pero ya con las dos manos. Godofredo Daireaux.
La concentración
en tus propósitos es fundamental para llegar a las metas que deseas. En la
medida en que dispersas tu atención, se retardan o se pierden los objetivos
anhelados. La concentración es una disciplina de la mente y voluntad para hacer
efectivos los deseos profundos del corazón.
Padre Natalio
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por
concederme un día más para adorarte y
servirte. Hagamos como decía San Agustín: Señor a Ti
solo busco, a Ti solo amo y tuyo quiero ser.
Mi único deseo es conocerte y amarte. (Sol
1,1,). La mies es mucha y pocos son los obreros
para recogerla. El Señor dijo: Vengan a mí los que estan
cansados y agobiados, que yo los consolaré Mt 11.28. Es la Palabra
de Dios. Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo
dibulgo cada día Pequeñas Semillitas, con el
vehemente deseo de que se propague la Fe, en
el Sagrado Corazón de Jesús y suplico a todos
los creyentes y no creyentes, que pidan al
Señor Jesucristo en oración, que no haya más
guerras ni hambre en el Mundo, ni atentados
terroristas, ni políticos de guante blanco y reine la Paz, así
como el amor, en todos los rincones del Orbe. Así sea.
Detente, el Sagrado Corazón de Jesús, está conmigo. Casimiro López