La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que produce un deterioro progresivo de las funciones cognitivas, de las
conductas y de la funcionalidad de los pacientes. Al inicio de la enfermedad, pueden observarse problemas
en la memoria reciente (conversaciones o preguntas reiterativas, pérdida de pertenencias, olvido de eventos o de citas,
desorientación en lugares conocidos), pérdida de la iniciativa, depresión y dificultad para realizar las actividades cotidianas,
aunque también la enfermedad puede manifestarse de otras formas. Hasta ahora no ha sido identificado un único factor como
la causa de la enfermedad, pero sabemos que se relaciona con lesiones producidas por la acumulación anormal de ciertas
proteínas presentes habitualmente en el cerebro, tanto dentro como fuera de las neuronas.