Los cojines son unos de los elementos decorativos que más personalidad aportan a cualquiera de las estancias en las que se sitúen. Antiguamente, los almohadones o cojines eran de uso exclusivo de las clases altas, por ello, podemos hacer que sea una pieza única y sofisticada para nuestra casa.
Las partes que, generalmente, posee un cojín son tres: el relleno, una funda interior y una funda exterior. El relleno puede ser de una gran variedad de materiales blandos (algodón, plumas, lana, etc.), que son los que permiten que tenga esa consistencia y, a su vez, resulten tan cómodos. Por otro lado, la funda interior consiste en una tela fina, que normalmente es de algodón y que recubre el relleno. Por último, la funda exterior es la parte más decorativa de todo el cojín ya que es la única que se ve.
Partiendo de estas tres partes, podemos hacer varios diseños de cojines que no sólo estén relacionados con dibujos o texturas que nos sirvan para acomodarnos, sino que también podemos inventar su forma y crear figuras que se asemejen a objetos reales.
Cojín cuadrado
Un cojín cuadrado es muy sencillo de hacer ya que las medidas que hemos de cortar en las telas son la mismas para todas. Ya que la forma es de las más simples que podamos encontrar, para hacer un cojín cuadrado, deberíamos centrarnos más en el diseño para conseguir un artículo llamativo que destaque por sus colores y por sus dibujos.


Lo primero es seleccionar una tela bonita en la que plasmemos nuestro diseño ya sea con técnicas como el patchwork, pintura para tela, bordados, etc. Después, cosemos el cojín por tres lados, introducimos el relleno (preferiblemente con la funda interior de la que hablábamos antes) y, finalmente, cosemos el lado que falta.
Cojín redondo
Los cojines redondos dan mucho juego a la hora de decorar ya que aportan dinamismo y movimiento al sofá. Están menos vistos que los cuadrados o que los rectangulares y tienen una elaboración muy sencilla.
Para realizarlos, hay que seguir unos sencillos pasos: cortar una tela de manera rectangular, coser los lados más estrechos y, a continuación, uno de los lados largos con un dobladillo para evitar que se deshilache, rellena el cojín y cose el otro lado con hilo fuerte. Para tapar los hilos puedes poner un botón o cualquier otro elemento decorativo que se te ocurra.
Cojín con formas
Para realizar un cojín con formas, hay muchos tipos de patrones a seguir dado que todo depende del diseño que queramos realizar. Lo que te proponemos es hacer algún animal cuya elaboración no sea muy compleja si eres principiante.
Las pautas que puedes seguir para hacer un cojín de algún animalito es, en primer lugar, hacer un boceto del diseño para determinar las formas de las telas que debes cortar ya que tienes que tener en cuenta que debes hacerlo en varias partes: el cuerpo, la cabeza, las patas y, por último, hay que añadirle detalles como ojos, nariz, boca, etc.
Comienza por cortar todas las telas, a continuación, rellena y cose los bordes con cuidado para que no quede ninguna parte irregular o asimétrica y, finalmente, une cada parte del cuerpo para poder añadir bonitos detalles que lo perfeccionen.

