Acuérdate de mí
Cuando sientas que la fatiga de tu cuerpo invada tu alma,
acuérdate de mí y empieza de nuevo; cuando tu mirada se pierda en el
infinito y veas tus lágrimas caer, acuérdate de mí y responde mi ruego; cuando
seas objeto de incomprensión de las personas y tengas deseos de amar y
ser amada con sinceridad, acuérdate de mi, que aquí están abiertos mi corazón
y mis brazos esperándote a ti para poderte abrazar.
Cuando veas que el cielo se torna gris, es sin duda que va llover, evoca una
plegaria a Dios que nos permita acortar la distancia y acuérdate de mí, pero
no me llames extranjero, que a partir de ahora soy parte de ti y tú
serás parte de mí...
Cuando sientas que las horas te encarcelan, vuela con tu voz a cantarme
tus poemas; en silencio en penumbras yo te sueño como hoja que arrastra
el frío invierno y susurra la brisa tu llamada alejando la agonía de la distancia.
Cuando con gestos indefinidos me acerques, la ruta del olvido será historia
despertarán los pétalos dormidos para ser sinfonía de emociones.
Cuando sientas que todos se van de tu lado, no importa mi amor, ya no me
siento extranjera a tu lado, me basta mirar el infinito para verme reflejada
en tus ojos y toda duda e incomprensión se va, me recordaré de ti cuando
sienta el frío de la soledad, porque sabré que en algún lugar tú estarás,
esperando por mí, me sentiré amada, me sentiré feliz que alguien a lo
lejos se acuerda de mí.
Ya no somos uno, somos dos,
me llevo lo mejor de ti y tú te llevas lo mejor de mí.
Cuando sientas que te digo al oído "te amo", será cuando nuestras vidas
han llegado a su final, entonces te abrazaré y pensaré que este amor que
tanto soñé ya es realidad.