El Padrenuestro comentado
Perdona nuestras ofensas.
Comentario:
Todos los días debemos pedir perdón a Dios, porque la condición del hombre es de ser un pecador que necesita siempre el perdón de Dios, ya que muchas veces al día cae en faltas que, si no son graves, al menos van oscureciendo el alma.
Entonces en los Padrenuestros que rezamos en cada Rosario, pedimos a Dios perdón por nuestros pecados, y así reconocemos que somos pecadores, y esto nos lleva a la humildad, la mejor virtud para contrarrestar la acción del Maligno en nosotros.
Y aunque ya no tengamos la desgracia de caer en pecados graves, igual es bueno siempre pedirle perdón a Dios por todos los pecados pasados ya perdonados, pero que al ponerlos nuevamente ante nuestra mirada espiritual, nos ayuda a darnos cuenta que somos nada, y que sólo Dios es grande y santo.
Cada vez que le decimos a Dios, le rogamos a Dios, que nos perdone, cada vez entra más en lo profundo de nuestra alma la seguridad del perdón de Dios, y la paz toma bajo su cuidado nuestros corazones y el miedo se expulsa de nuestra alma, para dar lugar al amor y a la alegría.
Si supiéramos todo lo que recibimos al rezar bien el Santo Rosario, no dejaríamos de rezarlo ni un solo día, y además, trataríamos de multiplicar los Rosarios rezados cada día, porque si trabajamos y nos desgastamos tanto para ganar dinero, ¡cuánto más haríamos si viéramos con los ojos del cuerpo las infinitas riquezas espirituales y hasta materiales, que lucramos con el rezo cotidiano del Rosario!