Hermanitaaaaaa, cuántos regalitos y qué preciosidades!!! 
No los había visto amiga, mil gracias por ese corazón hermoso que tienes y tanta generosidad qué me demuestras siempre.
Amiguita, te ruego me disculpes por no haberte contestado a tu correo hermoso que me mandaste hace unos días, no he estado con mucho ánimo para escribir ni para enviar correos, por eso cuándo me enviaste los vestiditos te devolvió el correo, porque hace mucho que no mando y a mi me llegan todos los días.
Recibí tus vestiditos, unos el sábado y otros el domingo, no imaginas la gran ilusión que me han hecho y cuánto me gustan, parezco una niña pequeña cuándo los veo, con sonrisa de oreja a oreja, están todos preciosos!!! y además me hiciste una firmita con gatito que los amooooo, mil gracias mi niña, no sé como agradecer tanto y tanto qué me das.
Queda pendiente en contestar a un correo tuyo, no lo olvido, sólo te pido me tengas paciencia.
Estoy con las terapias y me voy encontrando mucho mejor, ya te contaré mi hermosa amiga.
Qué Dios te bendiga y dulce noche para ti mi linda Maryel.
Te quiero mucho.