¿Por qué nos valoramos tan poco como
para permitir que el otro nos falte el respeto
y apenas se interese y/o quiera conocer lo que en realidad somos?
Estamos en un mundo plano, en el que,
desde niños, se nos enseña a juzgar... y a juzgarnos!
Y eso fomenta la calificación y la descalificación,
lo bueno y lo malo! Así
, lo bueno se hace imprescindible y lo malo, en cambio,
despreciable! No hay duda posible!
Si uno se cree sin valor alguno como persona,
aceptará cualquier situación para ser aceptado,
a cualquier precio! Y ese es, sin duda,
el primer paso que propiciará la entrega total y desmedida..
. así como la renuncia a uno mismo,
con tal de ser aceptado!
Así, dejar de juzgarse a uno mismo,
aceptar la singularidad de cada persona
y valorarse uno mismo por lo que es
, es la única forma de evitar algo tan frecuente -como lamentable-
como es cualquier falta de respeto!