Para obtener un corazón misericordioso
Oh Jesús, comprendo que Tu misericordia va más allá de la imaginación y por tanto Te suplico que hagas nú corazón tan grande que pueda contener las necesidades de todas las almas que viven sobre toda la faz de la tierra. Oh Jesús, mi amor se extiende más allá, hasta las almas que sufren en el purgatorio... Haz mi corazón sensible a todos los sufrimientos de mi prójimo, sean de cuerpo o del alma. Oh Jesús mío, sé que Te comportas con nosotros como nosotros nos comportamos con el prójimo... Haz mi corazón semejante a Tu Corazón misericordioso (Diario, 692).
Oh Jesús, haz a mi corazón semejante al Tuyo, o más bien transfórmalo en Tu propio [Corazón] para que pueda sentir las necesidades de otros corazones y, especialmente, de los que sufren y están tristes. Que los rayos de la misericordia descansen en mi corazón. (Diario, 514). Jesús, ayúdame a pasar por la vida haciendo el bien a todo el mundo (Diario, 692).