Mis querida amigas, ante todo muchísimas gracias a todas por vuestras
palabras y por tanto y cariño como me habeis dado.
Ya me encuentro un poco mejor de ánimo, pero el golpe ha sido
muy duro porque estaba convencida que esta vez todo iría bien.
Dios sabe cuanto deseamos tener nuestro hijo pero sus caminos
no son nuestros caminos. Yo tengo fe en que, en algún momento
de nuestra vida, nos dará ese bebé que ansiamos. Afortunadamente
tengo un marido que no lo hay mejor, me consuela, me apoya, me
da todo el amor del mundo, es un tesoro precioso, un regalo de Dios.
Mañana lunes ya me reincorporo al trabajo con mi esposo y ya
estaré de nuevo con todas en la casita.
Mil gracias de nuevo mis queridas angelitas, os quiero mucho.
Eithlin (Beatriz)