Imagina...
que un Ángel de Dios está a tu lado en estos momentos...
Silencio...
Quédate tranquilo y piensa en todos los problemas que te gustaría solucionar.
Todo lo que te angustia, te hace llorar, te oprime, te preocupa, te deja triste.
Hasta tu miedo del futuro, de equivocarte, de escoger el camino errado...
Piensa ahora en todo eso...