-“¿Qué vas a hacer?” preguntó la hermana,
-“Voy a esconder la mariposa en mis manos y preguntarle al sabio si esta viva o muerta”. Si el dijese que esta muerta abriré mis manos y la dejaré volar, si dice que esta viva la apretaré y la aplastaré”.
Y así cualquiera que sea su respuesta, sería una respuesta equivocada!.
Las dos niñas fueron entonces al encuentro del sabio, que estaba meditando.
“Tengo aquí una mariposa azul. Dígame, sabio, esta viva o muerta?
Muy calmadamente el sabio sonrió y respondió
“Depende de ti ….. Ella esta en tus manos”
Así es nuestra vida, nuestro presente y nuestro futuro. No debemos culpar a nadie cuando algo falle, somos responsable por aquello que conquistamos (o no conquistamos).
Nuestra vida esta en nuestras manos, como la mariposa azul….. Nos toca a nosotros escoger que hacer con ella.
“El temor del Eterno es el principio de la sabiduría, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia”
Proverbios 9:8-9
“Corrige al sabio, y te amará. Da al sabio, y será más sabio; enseña al justo, y aumentará su saber”.