Quince minutos con Jesús Misericordioso
Por los pecadores.
Jesús Misericordioso, hoy quiero pedirte especialmente que derrames tu Misericordia sobre los pobres pecadores, porque no saben el peligro que corren de perderse para siempre, entregándose al pecado y por eso al mismo demonio, con probabilidad de terminar en el Infierno eterno.
Si los hombres y en especial los más pecadores, viéramos realmente lo que se pierde con el pecado, no pecaríamos tan fácilmente. Por eso te ruego, querido Jesús, que tengas especial misericordia por los que están más alejados de Ti, e incluso por aquellos que nadie reza, porque nadie los quiere ya que se hacen odiar de todos, y sólo Tú y la Virgen los aman. Ten compasión de ellos porque no saben lo que hacen. Si nosotros, que nos decimos estar en tu camino, a veces a pesar de tantos dones y gracias recibidos de tus manos generosas, somos tan tibios, e incluso tan pecadores, ¿qué será para aquéllos que han recibido menos de Ti o que lo han malgastado como el hijo pródigo?
Jesús, Tú eres Dios, y puedes tocar los corazones más mezquinos y endurecidos. Te pido especialmente por los más pecadores, los obstinados, para que los libres del abismo al cual se dirigen; porque tu Misericordia es infinita, y Tú quieres hacer de los más grandes pecadores, obras maestras de tu redención, santos de tu Cielo.