Hoy, otra vez, me levante a la fuerza; hoy, otra vez, me levanté con sentimientos encontrados; con ganas de vivir, sí pero lejos del mundo y las tentaciones.
Y es que, lo admiro, tanto, lo añoro, tanto, lo cuido, tanto, lo mimo, tanto, lo amo, tanto, pero, ¡hay…! no hallo respuesta en el amor.
Hoy, otra vez, me levante a la fuerza; hoy, otra vez, me levanté con sentimientos encontrados; con ganas de vivir, sí pero silvestre y solitaria, como gata salvaje o, como el cóndor, cuando surca el cielo, en su, esforzado, viaje.
Y es que, lo admiro, tanto, lo añoro, tanto, lo cuido, tanto, lo mimo, tanto, lo amo, tanto, pero, ¡hay…! no hallo respuesta en el amor.
Hoy, otra vez, me levante a la fuerza; hoy, otra vez, me levanté con sentimientos encontrados; con ganas de vivir, sí pero, apartada, en los confines de la tierra o en la cara, oscura, de la luna.
Y es que, lo admiro, tanto, lo añoro, tanto, lo cuido, tanto, lo mimo, tanto, lo amo, tanto, pero, ¡hay…! no hallo respuesta en el amor.
¡Oh, Dios! Lo hiciste, tan, bello; lo hiciste, tan, dulce; lo hiciste, tan, tierno; lo hiciste, tan, sabio; y es, tan, amoroso pero, lo hiciste, aún, más espinoso que una rosa.
Hoy, otra vez, me levante a la fuerza; hoy, otra vez, me levanté con sentimientos encontrados; y es que, guardo, tanto, amor para colmarlo y,
que pena, no poder entregarle.
Hoy, otra vez, me levante a la fuerza; hoy, otra vez, me levanté con sentimientos encontrados; queriendo soñarlo, queriendo buscarlo, soñando encontrarlo; con ganas de vivir, sí pero junto a él.