En octubre pasado, la fundación estadounidense protectora de animales Seminole County Animal Service en Florida (Estados Unidos) encontró a una gata parapléjica de 7 meses de edad en la calle.
La pequeña minina, bautizada como Ruth y quien puede moverse arrastrándose sólo con las patas delanteras, no estaba sola. Era cuidada por Idgie, un perro que no dudaba en ladrar y gruñir para espantar a quien se acercase sospechosamente a su amiga.
“Ambos se encontraban en bastante buena forma, ni sucios o desnutridos, por lo que probablemente tuvieron una casa en algún momento”, Diane Gagliano, miembro del refugio de animales. Sin embargo, nadie los reclamó, por lo que se presume un abandono.
En este caso, el recinto tuvo que establecer una medida especial para mantener a los animales juntos, porque cuando los separaban, Idgie sufría mucho.
Afortunadamente, Jacqueline Borum, dueña de un salón de belleza en Hollywood, adoptó a los dos y los mantiene en su negocio, donde “todo el mundo puede disfrutar y cuidar de ellos”, dijo.