Cuando desmayes,
cuando sientas decaer, cuando la
bruma te arrope, mi mano estará allí
para sacarte de la profundidad.
Si las olas remolcan tu ser, y a la deriva estés,
si aislada, rechazada y solitaria estas,
allí estaré.
Allí estaré, para secar tus lágrimas,
para mi hombro darte,
para entregarte mi amistad
y hacerte convencer que no estas sola.
Tendré la palabra exacta para reconfortarte,
el aliento oportuno para animarte,
la lámpara adecuada para iluminarte,
y la puerta precisa para salir del hoyo
hacia una nueva esperanza
que desde hoy debes caminar
en busca de un nuevo mañana.
Esta prohibido bajar la cabeza,
por que te cierras ver el panorama
de posibilidades que hoy llueven
en tu nombre para escoger
con humildad las nuevas vías
para recorrer.
Al voltear a un lado
en busca de compañía
en tu soledad, en la alegría o el llanto,
en el triunfo o el fracaso,
allí estaré."