Yo estaba con mi nieto en el Salón del Reino, sentada en segunda fila escuchando al conferenciante, al sentir los primeros
movimientos mi curiosidad se centró precisamente en el conferenciante, quería ver cual sería su actitud al venir el movimiento
mas fuerte (es un anciano de mi congregación de apenas 27 años) y (yo estaba segura que venía el remezón más fuerte) , y
su tranquilidad creo que al más cobarde lo mantuvo en su lugar, solo me quedó pensar si así vendrá el Armagedón y si todos
tendremos la misma tranquilidad para esperar los acontecimientos
Por suerte yo no temo a los temblores ni mi familia tampoco, solo nos tomamos de la mano con Iriti y quedamos expectantes
por si se nos ordenaba abandonar el recinto, nada sucedió y la reunión siguió como si nada hubiera ocurrido.
Al terminar la reunión, la bromas iban y venían felicitabamos al conferenciante pero le deciamos que pediriamos que nunca más
lo designaran porque sus palabras remecieron la tierra ja ja ja