Que difícil tenerte tan lejos de mi… La noche se torna silenciosa, callada, solo el eco de tu voz alimenta mi alma, recostada en mi lecho recuerdo tu mirada, dulce dolor amarte en la distancia, dulce tormento extrañarte con tanto anhelo, mi mirada se pierde en el horizonte de mis sueños, mis manos desean tocarte y mis labios besarte, mientras escucho una bella melodía, una lágrima rueda por mi mejilla, con mirada borrosa miro tu fotografía, siempre sonriente, siempre tan complaciente, hombre de mirada seductora y varonil presencia
de ojos negros,
dulces y tiernos que cautivan, que envuelven, que estremecen, y con sutil mirada
recorren mi cuerpo y desnudan mi alma… Mi adorable seductor, en tus caricias me pierdo y con
tus besos enloquezco… eres mi deseo. Así te siento, así te amo, así te pienso.