Sueños del Paraiso, de un hombre indiferente, de una mujer que ignora su desnudez vibrante, de malevola astucia bajo piel de serpiente, de monotonas horas, ociosidad constante
Apacible murmullo de la voz seductora que descubre y describe rigor de cautiverio; el suelo idealizado, la oferta tentadora, y la miel en los labios del mas dulce adulterio
Confidencias
Me confeso el secreto y la delicia de cada seduccion, cada aventura, al aire libre o en la noche oscura, con un brillo en sus ojos de malicia.
Respondia su mano a mi caricia, amalgamando extitica dulzura a cada refinada travesura, viendo yo mas notoria mi impericia.
Hablaba, hablaba de cada experiencia con la sensualidad y la inocencia de quien practica acciones naturales.
Y naturales eran. Prontamente le somete mi corazon, mi mente, y todos mis instintos animales.