La mujer despertó con un ruido que le hizo adivinar que afuera había gente...
El sol inundaba alegre su pieza como cada día, un día como todos, lleno sólo con su propia presencia. Afuera junto a su puerta sentía claramente el trajín de personas que querían entrar. Eran voces de hombres. Lo raro de todo es que habían entrado por su antejardín que siempre dejaba precautoriamente con llave.
Pensó en no abrir, después de todo sería su derecho y se estaba bien así, en tranquilidad... pero, de pronto sintió que habían entrado. Entonces saltó veloz de su cama, poniéndose algo encima y se planta frente a tres hombres que venían penetrando por el ventanal, - ese mismo que es tan seguro - y así pudo discernir que esta visita escondía algo muy serio.
Entonces supo que los tres hombres eran investigadores... pero, qué buscaban en su casa? irritada les increpó duramente , pero ellos siguieron fríamente con su labor, no podía creer lo que estaba viviendo... sabía que su vida era correcta , sin nada oculto, y no entendía nada. Finalmente ellos entraron a su habitación revisando todo, internamente supo que era inútil alegar y los dejó hacer. Los veía con su actuar desenvuelto, sus rostros impenetrables,
Revolviendo todo sin cesar. y vio en las manos de uno de ellos algo que le pareció un detector... sintió que estaba en medio de una pesadilla, que de pronto despertaría, porque le pareció ya sin dudas que lo que tanto buscaban eran indicios de drogas !
Supo entonces, que su mundo quieto y casi feliz había sido roto en el mismo momento que irrumpieron en su intimidad, que ya no importaba su inocencia, y que ahora estaba en manos de una prueba que podía deslizarse como un rayo y romper con todo en medio de su vida.
Sintió que la invadía una sensación de ahogo y se sintió caer blandamente en la nada...