Hace años, mi nieta , hoy de 15 años, compartía pieza conmigo. Despierto en la oscuridad de la madrugada y veo apenas con la lúz que se filtra por la ventana, que la pequeña está motada en su caballito balancín y se columpia con energía extraña para sus años, mientras sus rulos vuelan al aire ... Enciendo la lúz y la arropo en su cama. Ella nunca se subió sola al balancín antes ... fue extraño. Creo que ni siquiera comenté este hecho con nadie.
Chicas, de verdad lo conté, porque fue una situación fantasmagorica y sorpresiva en la oscuridad y ella de dos años apenas. O quizás eran sólo sus ansias de jugar?