Una vez, una amiga reclamaba contra un conocido común, alegando que la había decepcionado por éste o aquel detalle de su persona. También yo conocía sus fallos, pero no tuve más remedio que decirle:
- Él es así y todos lo sabemos, el asunto es: ¿le perdonas la vida o no? ¿Lo aceptas a pesar de sus defectos? Al menos tiene algunos talentos innegables.
Esa amiga SIEMPRE se decepciona de los demás.