SONETO DE LA ENCARNACION
Para que el alma viva en armonía
Con la materia consuetudinaria
Y, pagando la deuda originaria,
La noche humana se convierta en día.
Para que a la pobreza tuya y mía
Suceda una riqueza extraordinaria
Y para que la muerte necesaria
Se vuelva sempiterna lozanía.
Lo que no tiene iniciación empieza;
El día se transforma en noche oscura.
Lo que no tiene espacio se limita,
Se convierte en pobreza la riqueza.
El modelo de todos nos imita,
El Creador se vuelve criatura.
_Francisco Luis Bernardez