En lugares de verdes pastos me hace descansar.
Pero los impíos son como el mar agitado, que no puede estar quieto. No hay paz–dice mi Dios–para los impíos.
Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.
Confía callado en el SEÑOR y espérale con paciencia; no te irrites a causa del que prospera en su camino, por el hombre que lleva a cabo sus intrigas.
Pues el que ha entrado a su reposo, él mismo ha reposado de sus obras, como Dios reposó de las suyas.
No os dejéis llevar por doctrinas diversas y extrañas, porque buena cosa es para el corazón el ser fortalecido con la gracia.
…para que ya no seamos niños, sacudidos por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de doctrina, por la astucia de los hombres, por las artimañas engañosas del error; sino que hablando la verdad en amor, crezcamos en todos los aspectos en aquel que es la cabeza, es decir, Cristo,
10Por lo demás, fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza.
11Revestíos con toda la armadura de Dios para que podáis estar firmes contra las insidias del diablo.
A su sombra placentera me he sentado, y su fruto es dulce a mi paladar. El me ha traído a la sala del banquete, y su estandarte sobre mí es el amor.
Sal. 23:2 Is. 57:20,21 Mt. 11:28 Sal. 37:7 Heb. 4:10; 13:9 Ef. 4:14,15 Cant. 2:3,4