amargados percibido o verdadero, o resentidos por haber
sido tratados injustamente. La Biblia provee una
manera de sanar las heridas de la niñez.
Aquellos que han caído en la trampa de la
amargura pueden sanarse.
Promesas para sanar
el dolor de la niñez
"Echa sobre Jehová tu carga, él te sustentará;
no dejará para siempre al justo." Salmo 55:22.
"Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza,
Seguridad mía desde mi juventud. En ti he sido
sustentado desde el vientre; de las entrañas de
mi madre tú fuiste el que me sacó; de ti será
siempre mi alabanza" Salmo 71:5-6.
"Quítense de vosotros toda amargura, enojo,
ira, gritería y maledicencia, y toda malicia.
Antes sed benignos unos con otros,
misericordiosos, , perdonándoos unos a otros,
Cómo dios también os perdonó
a vosotros en Cristo". Efesios 4:31-32.