LA ORACION QUE CONQUISTA – Ezequiel 22:30
El arma más poderosa que Dios dio a los cristianos es la oración. Debemos usarla con inteligencia, para obtener los resultados esperados. Dios anda buscando hombres y mujeres que hagan vallado, que es una especie de puente, para que la brecha que hay entre Dios y mi familia, mis amigos, mis conocidos, se cierre, y no les venga la destrucción.
La Biblia nos da un claro ejemplo en el libro de Nehemías de lo que puede hacer la oración en la vida de una persona y sus resultados en una familia, ciudad y nación.
Cómo? Aplicando 4 pasos básicos:
1- Nehemías 1:3-4 Asumir un interés personal por la gente:
Cuando Nehemías supo lo que estaban viviendo sus amigos, parientes, conciudadanos, de inmediato sintió dolor, rompió de su corazón la dureza. Debemos quitar la dureza de nuestro corazón, el conformismo, la quietud, y ser movidos a tener un interés personal, por nuestra casa, nuestra familia, nuestros vecinos, nuestros amigos, los compañeros de estudio o de trabajo. ¿Cómo se hace para tener ese interés personal por la gente? Hay que buscar el quebrantamiento, porque normalmente no nacemos con esa compasión pero cuando llegamos a Cristo, dice la Palabra en Romanos 5:5 que el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones. Así toda persona que se llame cristiana debe tener ese amor de Dios en el corazón, ese amor de entrega, de interés por los demás, que quiere la salvación, el cambio, la restauración de los que le rodean. ¿Qué se hace con ese interés?
2- Nehemías 1:5-11 Orar: Es una oración con clamor, con angustia, de vida o muerte, que rompa los cielos, esa oración tiene varios componentes:
a- Vrs 5 Pedir la misericordia de Dios. Recuerde que todo es por Su misericordia, clame por su casa la misericordia de Dios, sobre cada familiar, sobre sus amigos, vecinos, y verá la respuesta de Dios. 2 Corintios 10:5
b- Vrs 6 Confesar el pecado de su prójimo como si fuera propio. Nehemías confesó el pecado de su pueblo como propio, usted puede confesar el pecado de su familia, pedir a Dios perdón, por el de sus amigos, conocidos, para ver moverse la mano de Dios
c- Vrs 8-10 Confesar la Palabra que haya para su célula, vida, familia, ministerio, Nehemías recordó a Dios la promesa que había sobre su pueblo, que el mismo Dios había hecho. Dios está sujeto a su palabra, a las promesas que hay sobre nuestra casa, familia, amigos, compañeros de estudio y trabajo, la palabra es muy importante que en la oración, reclame las promesas, confiese las promesas y verá grandes resultados.
3- Nehemías 2:10 Hacer con la oración perseverante Guerra Espiritual: Además de esa oración de clamor, nos debemos levantar en esa oración de guerra espiritual, en donde se levanta una batalla en los aires de Cali, del Valle del Cauca, por cada una de las personas que estamos orando. El enemigo que los ha tenido cautivos no los va a soltar tan fácil, cuando Nehemías llegó a reconstruir los muros, se levanto oposición, y lo único que puede hacer quebrantar la oposición es la guerra espiritual. Por eso cuando uno comienza a orar por la familia, como que se levanta peor, peleas, conflictos, o en el trabajo, entienda, no debe dejar de orar, sino fortalecerse en la guerra espiritual hay armas de guerra que dios nos ha dado, estás son:
Usar El nombre de Jesús. Tú recordarás la época de David en que Saúl era rey, que se levantó un gigante y desafió al pueblo de Israel y a todo el ejército de Saúl. Todos estaban asustados y temblando, pero David se levantó y dijo que se enfrentaría ante él. El rey trató de ponerle las armas naturales, pero David tropezaba con éstas armas por eso dijo: “Rey yo nunca he usado esto, déjame escoger mis armas.” Y escogió armas sencillas, dándose a entender que las armas que Dios nos ha dado no son como las que usan las demás personas sino que son armas espirituales. 1 Samuel 17:45-47 La primera arma que usa David es el nombre de Dios. Nosotros no nos enfrentamos ante los poderes demoníacos en nuestro propio nombre sino que los enfrentamos en el nombre del Señor. Jesús dijo en Marcos 16:17 “Y los que creen en mi nombre echarán fuera demonios.” Cuando tu usas el nombre de Dios estás poniendo en acción todo el ejército celestial. Cuando David dice: “Vengo en el nombre de Dios” está diciendo que él no era el que iba a pelear, sino que la pelea era de Dios.
b- Debes conocer el poder de la cruz. 1Reyes 18:33. La leña nos habla de la cruz. La cruz tiene dos palos. Un palo vertical quiere decir una mirada hacia Dios. Un palo horizontal, quiere decir una mirada hacia la necesidad de la gente. La cruz nos habla de que en ese lugar un día toda la maldición fue rota. Un hombre llamado Jesús tomó toda la maldición, todo el fracaso, toda la enfermedad, toda la pobreza, toda la rebelión, llevándola sobre el madero y destruyéndola completamente. Es importante que entendamos la revelación de la cruz. Cuando una persona tiene la revelación de la cruz y puede llevar a sus familiares, amigos, vecinos, allí se rompen las cadenas de las ataduras, de lo que impide que conozcan de Cristo. Que le permitamos al Espíritu Santo que nos lleve en esa experiencia para poder sentir lo que Jesús sintió, y cuando esto sucede la maldición se quiebra y el poder del Espíritu Santo se revela a nuestra vida.
c- Debes Aplicar la sangre de Jesús. Apocalipsis 12:11. Por la sangre que Cristo derramo en la cruz del calvario es que viene la victoria sobre el adversario. Al aplicar la sangre sobre las personas por las cuales vamos a orar, el enemigo no los podrá tocar, tendrá que pasar de largo de cada uno. Recuerde lo que dice Colosenses 1:13 que hace la sangre de Jesús, libera de todo poder de las tinieblas, eso debe quedar claro en su oración de guerra.
4- Nehemías 2:17-18 Asociación: Nehemías sabia que no podía conquistar solo, que necesitaba de los demás. De la misma manera, para conquistar con la oración de tres, no podemos hacerlo solos, necesitamos asociarnos en grupos de a tres personas, en donde cada uno incluye tres personas, por las cuales van a orar durante un mes, para ser conquistadas. No es lo mismo la oración solito, que la oración unida. En cada célula vamos a levantar un muro de oración de conquista, y vamos a ver a nuestras familias, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, rendidos a los pies de Cristo, en libertad, vamos a ver familias restauradas, hogares restaurados, y cada célula es el canal de bendición para que esto suceda.
5- Ser obediente a Dios en todo. 1 Reyes 18:31. Tú tienes que ser obediente a lo que Dios te dice que hagas. Elías tuvo que ser obediente y aunque no era fácil enfrentarse a una cultura pagana, él le creyó a Dios y fue obediente. Por causa de su obediencia Dios respondió con fuego, tomó el sacrificio, tomó la leña, tomó el fuego, tomó el agua, y todo lo que el profeta le había ofrecido porque Dios se agradó de esa ofrenda.
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