A pesar de lo que soy
Dejaste tus palacios de marfil para convertirte en humano y aunque tu amor nunca merecí no me dejaste en mi pecado. A pesar de lo que soy decidiste pagar por mi y aunque no fue leve tu dolor lo soportaste aun así. A pesar de lo que soy derramaste tu preciosa sangre y aunque no valoré tu don no dejaste de buscarme. A pesar de mi ingratitud me mostraste tu bondad y aunque no comprendí tu magnitud no me pagaste conforme a mi maldad. A pesar de lo que fui me diste otra oportunidad y aunque mucho tiempo perdí me demostraste piedad. A pesar de mi insensatez aún tus promesas cumpliste y aunque te fallé una y otra vez una nueva hoja en blanco me diste. A pesar de lo que soy aún quieres utilizarme y aunque no tengo valor insistes en valorarme. A pesar de lo que soy tienes un propósito conmigo y prometes cumplirlo desde hoy aunque yo piense que de nada sirvo. A pesar de mi indignidad tuviste un plan para mi aunque soy una insignificante mortal que no sabe estar sin ti...
Maria Alejandra Labatti
Dios les bendiga,
Ximena
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