Tu tienes talentos, valoralos!
Un carpintero tenía un
hermano que era un músico famoso. Cuando su hermano vino de visita a la compañía
constructora donde trabajaba, el capataz le dijo:
-Debe estar orgulloso de tener un hermano
que el mundo entero conoce por su música.
Luego, sintiendo que quizá había
menospreciado a su empleado, agregó con torpeza:
-Por supuesto, no todos en la familia
pueden tener el mismo talento.
-Usted tiene razón. Mi hermano no sabe
nada acerca de construir una casa. Tiene la suerte de poder contratar a otros
para que le construyan la suya.
El músico afirmó y agregó:
-Tanto mi hermano como yo trabajamos con
las manos. Yo sostengo un instrumento musical en las mías y él un martillo en
las suyas.
No todos tenemos el llamado a transitar a
través de la vida por los mismos caminos. Si así fuera, ¡no cabe duda que
veríamos muy concurrido nuestro camino!
Booker T.Washington escribió en el libro
Desde la Esclavitud: Hay tanta dignidad en labrar el campo como en escribir un
poema. La dignidad reside en el corazón y en la actitud del hombre, no en la
descripción de su trabajo.
Todo llamado es grande si se persigue
tenazmente.
Prosigo hacia la meta para obtener el
premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. Filipenses
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