Estas cansado de luchar con esa misma área en tu vida; en muchas ocasiones pediste perdón, en muchas otras prometiste no volverlo a hacer, te mantuviste firme muchos días y sentías que por fin lo habías superado, pero de pronto te permitiste seducir por lo mismo y volviste a caer.
Te vez al espejo y realmente te das cuenta que estas cansado de luchar con lo mismo y no poderlo superar, por un momento crees que no puedes ser parte de Reino de los Cielo de esta manera, tú mismo te destituyes creyendo que no mereces mas nada de Dios.
Hay un sentimiento de impotencia, quieres hacer las cosas bien mas siempre terminas cediendo tarde o temprano, sinceramente ya no hallas que mas hacer, te sientes casi vencido y sin nada que pueda ser un revulsivo para salir adelante.
Te sientas en tu computadora, esperando que haya una Palabra para ti, antes de abrir el correo dijiste: “Señor necesito una Palabra tuya”.
Dios tenía preparado este momento, no es una coincidencia ni mucho menos un invento, Dios sabia que a esta hora ibas a venir de esta manera: “Cansado de luchar con lo mismo y esperando que Dios te hablara de una manera sobrenatural”.
En la agenda de Dios estaba este día a esta hora y de la manera que está siendo, no es un sueño, no es un invento, menos una casualidad, es porque tenía que ser de esta manera.
He aquí las palabras que Dios me impulsa a escribir especialmente para ti:
Niña de mis ojos, Perla de Gran Precio, hijo amado, yo te amo con un amor eterno que nunca dejara de ser, pueda que las imperfecciones que hallan en ti te hagan sentirte indigno de mi, pero mi amor por ti es más grande de lo que te imaginas, aun cuando eres infiel, yo permanezco fiel a ti porque creo en ti, porque confío en que serás un instrumento poderoso en mis manos.
No llores más, no te pongas triste, deja de sentirte culpable, yo te recojo hoy, te abrazo fuerte y te digo: “Mío eres tú”, te levanto del polvo y hago de ti una obra preciosa, mi visión para tu vida va mas allá de este momento, se de lo que eres capaz y por eso no te quiero soltar, vales más de lo que un día te imaginaste, tu naciste para esto, te llame para ser de bendición, no te dejes engañar, esta tribulación momentánea solo hará de ti un mejor siervo.
Hijito lindo, hijita preciosa, no te imaginas lo mucho que te amo, lo mucho que deseo que estés a mi lado siempre, quiero escucharte hablar, quiero escucharte entonar esa alabanza que tanto me gusta, cierra tus ojos, alábame, cántame que yo estoy aquí para escucharte, mis ojos están puestos en ti, nunca te he abandonado, siempre he estado acá, no me dejes mas, acércate a mi porque yo estoy a tu lado, deja que te abrase mientras cantas, deja que renueve tus fuerzas en medio de la alabanza, recobra el ánimo, yo creo en ti y en lo que llegaras a ser, solo levántate, ponte tu ropa de príncipe y date cuenta hoy de lo que eres, amada que tu vestido de princesa salga a relucir porque eres mi hija y yo tu Rey.
Hoy te levanto en el Poder de mi Nombre y declaro sobre tu vida que eres más que vencedor en mí. A partir de hoy iniciamos una nueva relación personal, se que tu pondrás de tu parte y Yo pondré la mía, porque nunca te dejare ni te desamparare, estaré contigo todos los días de tu vida hasta el fin del mundo, iré delante de ti como Poderoso Gigante peleando tus batallas y aunque el enemigo viniera como rio sobre ti, Yo levantare bandera por ti, porque Mío eres tú.
F. Tu Padre que Tanto te Ama
Amados, posiblemente hoy estés casando de luchar con lo mismo pero algo te puedo confirmar y es que Dios es quien te habla en este día. Mientras escribía sentía como su Mano Poderosa estaba sobre mi vida, las lágrimas se asomaron en mis ojos y una convicción de que para alguien en especial se escribió estas palabras también.
Solo déjame decirte que Dios te ama y nunca se ha olvidado de ti, por favor no te olvides de Él, que a partir de hoy puedas renovar una relación íntima con El.
Dios nos acompaña a cada uno de nosotros, nos da el valor y el auxilio que necesitamos ante las situaciones adversas de la vida. Él nos defenderá y sostendrá con su justicia frente a quienes nos quieran hacer daño.
Quisiera resaltar una palabra que infunde gran alivio: siempre. Esto significa que Dios no sólo estará contigo hoy, sino que lo estará en todo tiempo, en todo lugar, y en toda circunstancia.
Señor solo déjame sentirte cada día más en mi vida, te amo Jesús
Enrique Monterroza