El creyente tiene el privilegio de orar e interceder por otros, algunos creen que la oración solo ayuda al que ora que es un ejercicio vano porque DIOS es omnisciente, más la palabra nos ordena que intercedamos por otros, porque es un acto importante para DIOS,

Y nosotros sí, DIOS es omnisciente, pero también desea relacionarce con los seres humanos, DIOS no revela las razones que motivan su cambio de parecer.

Esos cambios no son sinónimo de inconstancia sino de respuesta a la intercesión humana, la oración es un misterio que debemos tomar en serio porque DIOS 

Lo hace al grado de responde en formas inesperadas

( 1ª Tim 2:1=2 )

 ¹ Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres;

    ² por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.

Con el cariño de siempre reciban un abrazo atentamente.