EL GOBIERNO DE DIOS
"El reino de éste mundo ha venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo y reinará por los siglos de los siglos". (Apocalipsis, 11:15).
El gobierno de la tierra por el hombre es un completo fracaso, no hay unidad, ni hermandad, ni paz entre los seres humanos, sean de la raza que sean.
Los políticos y militares solo piensan en si mismos, sin darse cuenta que van al fracaso, sin querer conocer lo que Dios espera de ellos.
¿Que debemos hacer?, ¿iniciar revoluciones o alzamientos contra los gobiernos? No sería sensato, estaríamos cambiando unos hombres por otros, y caeríamos en lo mismo.
Debemos acudir a Dios nuestro creador para tener un excelente gobierno acá en la tierra.
Bajo su reinado disfrutaremos de la vida sin fin, en paz, salud y felicidad.
El es el Soberano del universo, sin embargo pocos lo reconocen como su Rey y desean que su reino domine en la tierra.
El hombre más grande de la historia, Cristo, fué el que nos enseñó a través del Padrenuestro, a pedir por la venida del reino del Padre Celestial.
El reino de Dios es la única solución a los problemas del mundo, la paz y la seguridad solo se harán realidad mediante la administración de ese reino.
Según las profecías fué voluntad de Dios que Cristo muriera por los pecados de los hombres, y luego fuera resucitado de entre los muertos y volviera al cielo, sentándose a la diestra de Dios para llegar a ser rey.
"El, habiendo ofrecido por los pecados un solo sacrificio se sentó a la diestra de Dios para siempre, esperando desde entonces que sus enemigos sean puestos por escabel de sus pies". (Hebreos, 10:12-13).
Y luego que ocurra ésto, después del Apocalipsis, el Reino de Dios tan esperado, llegará a la tierra bajo el mando de Cristo, Rey de Reyes y Señor de Señores, a destruir el mundo de Satanás, para hacer que la voluntad de su Padre se cumpla aquí en la tierra como en el cielo.
Alégrense hombres de buena voluntad, porque eso significará vivir bajo el mejor gobierno del universo, el Reino de Dios, por medio de su Hijo el Cristo.
"Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó el Nombre que está sobre todo nombre. Para que el nombre de Jesús toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos, y toda lengua confiese que Cristo Jesús es Señor para gloria de Dios Padre". (Filipenses, 2:9-10-11).
LEONOR