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| De: lobo-alfa (Mensaje original) |
Enviado: 21/12/2010 06:02 |
Salmos 128: 1-6
La bienaventuranza del que teme a Jehová
Lei hace mucho tiempo la vida de Martin Lutero, Él llamaba a este salmo, el salmo de la familia y la verdad que es asi .
Esta lleno de promesas.
No hay nada malo en querer ser bendecidos.
La bendición, la mayoria de las veces significa prosperidad, inclusive en el verso el salmista afirma que el resultado de la bendicion es la prosperidad de Jerusalen.
Muchos cristianos necesitan entender que el cristianismo es humildad, pero no necesariamente pobreza o miseria.
No hay nada de malo en tener prosperidad.
Dios es el dueño del mundo, el Rey del universo y vos, y yo somos sus hijos.
Si sos hijo del Rey, sos un principe o princesa, Por que tenes que sentirse culpable por vivir como un principado???
El versiculo muestra el secreto de la verdadera prosperidad. Para Israel, la bendición, auténtica procedía de Sión, que era el lugar de la habitacion de Dios.
La prosperidad no es solo la acumulacion de cosas, son parte de la vida, no hacen mal a nadie.
(cuando no vienen "del Senor", traen dolor, angustia e insatisfaccion... Eso no es prosperidad).
Otro pensamiento que se destaca en el versiculo , tiene que ver con el presente.
La promesa de Dios es que veas la prosperidad "todos los dias de tu vida". Aqui y ahora. No solo en el futuro.
Es comun pensar que la maravilla de la salvacion es una experiencia que sera disfrutada en la eternidad.
La verdad es que, cuando Jesus regrese, recibiremos los beneficios eternos de la salvacion.
En ese entonces, Jesus colocara el punto final a la historia del mal. Pero, tambien es verdad que en esta tierra, durante "todos los dias de tu vida", tu puedes disfrutar las maravillas de las bendiciones divinas. Mejor salud, dinero administrado con sabiduria, una familia feliz
Salmos 128: 1-6
1 Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová,
Que anda en sus caminos.
Quiere decir, la persona que goza de la vida que es afortunado y feliz siempre; porque sabe y es plenamente consiente que goza de la gracia eterna del Dios viviente
2 Cuando comieres el trabajo de tus manos,
Bienaventurado serás, y te irá bien.
Quiere decir que honradamente trabajaras si estas bajo patron, no tomaras nada que no te pertenece, si eres patron, no abusaras de tus empleados si los tienes, ni le retendras el sueldo, pagaras lo que corresponde, y si puedes mas, nos los explotaras, los respetaras como a ti mismo, tendras las deudas saldadas con Dios primero despues con los hombres.
3 Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de tu casa;
Tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa.
Quiere decir, ella es tuya, tu carne, salio de tus costillas, la amaras con el alma y la respetaras, la honraras, la sustentaras en todas sus necesidades, ella ira a tu par, ni adelante ni atras, juntos.
los hijos seran muchos y benditos.. en tu casa y donde quiera que esten, Dios mandara a sus angeles a guardarlos en todo lugar, pues no les faltara el sustento nunca.
4 He aquí que así será bendecido el hombre
Que teme a Jehova
No con temor de miedo, temor a no querer ofender el corazón de Dios no hacer nada irreverente, algo que contriste el corazón de Dios
5 Bendígate Jehová desde Sion,
Y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida,
El verso muestra el secreto de la verdadera
prosperidad. Para Israel, nosotros la bendición, auténtica procedía de Sión, que era el lugar de la habitacion de Dios.
6 Y veas a los hijos de tus hijos.
y que él te permita ver tu descendencia tu prolongacion en buen estado, sano prosperos felices y en paz Paz sea sobre Israel.
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De: Debora7 |
Enviado: 23/12/2010 22:05 |
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Precioso tu mensaje
gracias por compartir
Hoy en día vemos muchos hogares fracasados, algunos sin ninguna esperanza de reintegrarse. La razón es que han querido ser ellos mismos en arquitectos; y no le han dado lugar a Dios para que gobierne sus hogares.
Si queremos un hogar de prosperidad y de éxito, debemos dejar que Dios sea el edificador y constructor. Nosotros, solamente debemos ser obreros que trabajan bajo la dirección de Dios. Es necesario entregar en las manos de Dios a nuestra familia y nuestros planes.
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DIOS LE BENDIGA
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