Nuestra boca expresa lo que hay en nuestra alma. La mente es parte del alma. Atraemos hacia nosotros las cosas con las cuales hemos llenado nuestra alma. Si mantenemos nuestra alma y nuestra boca llenas de duda, incredulidad, temor y expresiones negativas, estas se manifestaran en nuestra vida. De otro lado, si constantemente llenamos nuestra alma y nuestra boca de Dios, Su Palabra y Su Plan, eso es lo que tendremos. ¡La eleccion es nuestra! Joyce Meyer |