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El Evangelio de Hoy MIERCOLES 16 de FEBRERO 2011
Miércoles de la VI Semana del Tiempo Ordinario
¡Bienvenidos Hermanos y hermanas en Cristo Jesús!
Nos hemos reunido para leer la Palabra y alimentarnos de Cristo
que fortalece nuestra vida y nos compromete a vivir
y a llevar una vida Espiritual llena de amor y paz.
Con alegría leamos la palabra.
“Habla, Señor, que tu siervo escucha”.
“Señor, creo que en las Sagradas Escrituras que voy a leer
se contiene Tu Santa Palabra.Haz que la escuche con todo respeto y amor.
Ilumina mi mente para que por medio de ella yo conozca
Tu Santa voluntad, y mueve mi corazón para que yo cumpla con fidelidad
lo que Tú quieres de mí.Espíritu Santo, ilumina con Tu luz mi cabeza
y enciende mi corazón para que la palabra de Dios
pueda entrar y quedarse siempre en mí, para conocer por medio
de Tu Palabra, tu Divina Voluntad,lo que puedo y debo hacer,
lo que debo y puedo modificar,y que no depende de mi cambiar.
Como debo conducirme en los acontecimientos de la vida.
Señor, aquí tienes mi corazón abierto,
dispuesto a escuchar Tu Palabra con corazón sencillo
y con la voluntad decidida para obedecerle.
En Ti esta la luz y la salvación.
Amen y Amen
Primera Lectura
Libro de Génesis 8,6-13.20-22.
Cuarenta días después de que las aguas del diluvio habían ido bajando y ya se veían las cimas de los montes, Noé abrió la ventana que había hecho en el arca y soltó un cuervo. Este anduvo yendo y viniendo, hasta que se secó el agua en la tierra, Después soltó Noé una paloma, para ver si ya se había secado el agua sobre la superficie de la tierra. La paloma no encontró en dónde posarse y volvió al arca, porque aún había agua sobre la superficie de la tierra. Noé estiró el brazo, la tomó y la metió en el arca, Esperó otros siete días y volvió a soltar la paloma, que regresó al atardecer con una hoja de olivo en el pico, Noé comprendió que el agua sobre la tierra era ya muy poca, esperó otros siete días y soltó otra vez la paloma, la cual ya no regresó. El primer día del primer mes del año seiscientos uno se secó el agua en la tierra. Noé levantó la cubierta del arca y vio que la tierra estaba ya seca. Entonces salió del arca y construyó un altar al Señor; tomó animales y aves de toda especie pura y los ofreció en holocausto sobre el altar. Cuando el Señor aspiró la suave fragancia de las ofrendas, se dijo: "No volveré a maldecir la tierra a causa del hombre. Es cierto que el corazón humano se inclina al mal desde su infancia, pero yo no volveré a exterminar a los vivientes, como acabo de hacerlo. Mientras dure la tierra, no han de faltar siembra y cosecha, frío y calor, verano e invierno, día y noche".
Meditación
El final de la historia del Diluvio nos presenta la infinita bondad de Dios que, como dirá más adelante el Salmista, "sabe de qué barro estamos hechos y por eso no nos trata como merecemos". Basta con uno solo que lo reconozca como Señor y que esté dispuesto a hacer su voluntad para que el Señor se compadezca de toda la tierra. Su misericordia es más grande que nuestro pecado, por ello nos invita continuamente a acercarnos a él con gran confianza, pues si como padre corrige a sus hijos, con gran ternura los abraza y les ofrece de nuevo su Reino, su paz y su amor. Esto, por otro lado no debe ser la ocasión de tentarlo y decir, "ya que Dios nos perdona siempre, pues pequemos entonces y luego regresamos esperando a que nos perdone". Esto sería una burla. Cierto que Dios perdona, pero un verdadero arrepentimiento de parte del hombre implica un autentico cambio de conducta, es reparar el mal y buscar con todas nuestras fuerzas apartarnos de la ocasión de pecado. Esta actitud del hombre, presentada hoy en Noe es lo que siempre ha querido de nosotros. Si te has apartado de él, si lo has ofendido gravemente, no tengas temor de acercarte a él y recibir su Misericordia, pero no dejes de lado el proponerte un trabajo serio de cambio de tu vida.
Salmo 116(115),12-13.14-15.18-19.
¿Con qué pagaré al Señor todo el bien que me hizo? Alzaré la copa de la salvación e invocaré el nombre del Señor. Cumpliré mis votos al Señor, en presencia de todo su pueblo. ¡Qué penosa es para el Señor la muerte de sus amigos! Cumpliré mis votos al Señor, en presencia de todo su pueblo, en los atrios de la Casa del Señor, en medio de ti, Jerusalén. ¡Aleluya!
El Evangelio de hoy
Evangelio según San Marcos 8,22-26.
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a Betsaida y enseguida le llevaron a Jesús un ciego y le pedían que lo tocara. Tomándolo de la mano, Jesús lo sacó del pueblo, le puso saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntó: "¿Ves algo?" El ciego, empezando a ver, le dijo: "Veo a la gente, como si fueran árboles que caminan". Jesús le volvió a imponer las manos en los ojos y el hombre comenzó a ver perfectamente bien: estaba curado y veía todo con claridad. Jesús lo mandó a su casa, diciéndole: "Vete a tu casa, y si pasas por el pueblo, no se lo digas a nadie".
Reflexión
«Abre mis ojos... y contemplaré las maravillas de tu Ley»
«Jesús le puso saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntó si veía algo». El conocimiento es siempre progresivo... Tan sólo después de mucho tiempo y de largo aprendizaje se puede llegar al perfecto conocimiento. Primero se va todo lo sucio, se va la ceguera y entonces viene la luz. La saliva del Señor es una enseñanza perfecta: enseñar de manera perfecta viene de la boca del Señor. La saliva del Señor que, por decirlo de alguna manera, viene de su sustancia, es el conocimiento, tal como su palabra que sale de su boca, es un remedio... «Veo hombres, me parecen árboles, pero andan»; veo todavía en sombra, no veo del todo la verdad. El sentido de esta parábola es: veo alguna cosa en la Ley, pero todavía no percibo la luz esplendorosa del Evangelio... «Le puso otra vez las manos en los ojos; el hombre miró: estaba curado, y veía todo con claridad.» Veía, digo, todo lo que nosotros vemos: veía el misterio de la Trinidad, veía todos los sagrados misterios contenidos en el Evangelio... También nosotros los vemos porque creemos en Cristo que es la verdadera luz. Muchos piensan que la conversión es algo que sucede de manera instantánea y para siempre. Sin embargo, la conversión es un proceso que se inicia cuando uno se encuentra con Jesús y va progresando en la medida que permanecemos en Él. Esta curación de Jesús nos ilustra muy bien este proceso; cuando estamos lejos de Jesús somos como el ciego: no somos capaces de ver la realidad y por eso dependemos de los demás por eso con mucha frecuencia nos tropezamos. En el primer encuentro con Jesús se inicia el proceso, pero éste no es total. Empezamos a ver, pero no con claridad, y esto hace que las cosas se vean como no son. Ya vemos pero todavía podemos caer, sobre todo, porque es fácil confundir el camino en la vida espiritual y ver las cosas como no son. Finalmente, llega el momento en que se ve todo con claridad y será ahora mucho más difícil tropezar. El mundo entonces se nos presenta con toda la belleza con la que Dios lo creó y somos capaces de ver la maldad del pecado que es capaz de destruir nuestra vida. ¿En qué etapa de la vida espiritual estás tú?
Permite que el amor de Dios llene hoy tu vida. Ábrele tu corazón.Como María, todo por Jesús y para Jesús.
ME COMPROMETO HOY
El día de hoy ejerceré el perdón con quienes me han herido o lastimado y si yo he herido o lastimado a alguien, le pediré perdón y me reconciliaré con él o con ella.
Padre lleno de amor, tú que te complaces en la misericordia y no te dejas ganar en generosidad y compasión, perdona siempre nuestras faltas y todo aquello con lo que herimos a tus hijos alejándonos así de tu casa y de tu mesa, así, con la luz de tu Espíritu Santo reconoceremos que tu amor es más grande que nuestras faltas y volveremos a ti con un corazón contrito y humillado. Gloria y alabanza a ti, Señor.
Amen y Amen
* Te agradecería compartieras con tus amigos esta reflexión. Con el mayor de mis respetos. Saludos y Dios los Bendiga. *
Por tanto. ID enseñad a todos las naciones,
Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Y les dijo: id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura < marcos 16:15>
“Los cristianos estamos obligados a utilizar los mejores medios de comunicación a nuestro alcance
en cada época para difundir el Evangelio de Cristo” ...
SEÑOR Bendice NUESTRA CASITA
Y Todo Aquel Que Esta leyendo Este Mensaje y su familia.
¡¡¡NO OLVIDES SONREIR ESTE NUEVO AÑO!!!
GRACIAS POR TU AMISTAD
FELIZ DIA.
Si deseas escribirme, hazlo a este correo.
Gracias
Hermes281955@hotmail.com
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GRACIAS A LA HNA SILVIA POR EL FONDO
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