Ofertas
Hace unos instantes vino a mi esta palabra del cielo que quiero compartir contigo. Tiene que ver con la crisis económica que atraviesa el mundo, como consecuencia las preocupaciones agolpan nuestras vidas y nos quieren cautivar la paz que Cristo pago en la cruz. Recuerda que la Biblia dice: “el castigo de nuestra paz fue sobre El”, o sea que Jesus pago un precio muy alto por la paz que tu y yo disfrutamos hoy día. Como consecuencia de todos acontecimientos muchos están siendo tentados a aceptar ofertas las cuales quieren apresar tu vida; hay gente que se quieren encadenar con proyectos que no son de Dios los cuales tienen el propósito de enlazarte, dejarte inmóvil y atrasar el plan que Dios tiene para tu vida.
Hay ofertas de todos tipos: Ofertas para tu salvación, ofertas para tu matrimonio, ofertas para darte posiciones en ciertas iglesias, ofertas para llegar a la prosperidad; y en el ámbito secular productos gratuitos, 2 X 1, ofertas de empleo en otros países, ofertas de servicios gratis. ¿De qué o quién te estás dejando encadenar?
Tu familia no está de acuerdo, Dios te ha hablado una y otra vez, pero sigues en tu terquedad de hacer tu propia voluntad por encima de quien sea. Una vez más Dios te dice: ¡Alto! Hay proyectos que tienen como propósito hacerte esclavo del diablo. Tu me responderás: ¿como entonces podre salir hacia adelante con mi familia?
Recuerda que: “El justo por la fe vivirá” (Rom. 1:17) FE es confiar en Dios y caminar sobre Su Palabra para ver los imposibles convertidos en posibles. Los cristianos humanamente caminamos en el mismo mundo que todos, pero espiritualmente caminamos en el mundo de lo sobrenatural, donde vive nuestro Dios. La Fe hizo la diferencia que hizo que el pueblo de Israel saliese de Egipto, aunque no tenía armas para luchar contra los ejércitos de Faraón. Dios nos pone frente a los imposibles para hacerlos posibles. Su plan ha sido siempre que confiemos en Él para suplir nuestras necesidades. A los israelitas los llevó por el desierto donde nos les quedaba más que confiar en Él. Y para poseer la tierra prometida también tuvieron que depender de Dios. Los grandes milagros que acompañaron a Israel ilustran muy bien las palabras de Jesús: “Nada es imposible para el que cree”.
Te insto, una vez más a meditar sobre esa oferta tentadora que estas analizando a la luz de la Palabra de Dios. Es necesario que comiences a depender más del Señor; no permitas que nada ni nadie te robe el más grande galardón que Dios te ha dado, tu salvación.
Dale una oportunidad a Dios para que recobre el timón de tu embarcación hacia puerto seguro.
por Lucy Carmona
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