Alabemos al DIOS y padre de nuestro señor JESUCRISTO, pues es ÉL padre que nos tiene compasión y ÉL DIOS que siempre nos consuela;  ÉL nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar también…

En ocasiones es necesario, consolar cuando necesitamos ser consolados, y gracias damos al padre que por medio de su consolador ÉL SANTO ESPÍRITU, DEL PADRE Y DEL HIJO NOS CONSUELA Y esta con aquellos que han sido sellados con su Santo Espíritu, desde el momento que recibimos a JESUCRISTO como nuestro único DIOS y suficiente redentor y salvador…

Porque aquel que cree la inspiración verbal de la biblia. En un DIOS que existe eternamente en tres personas, a saber el Padre, el Hijo, el Espíritu Santo que JESUCRISTO es el unigénito del padre, concebido del Espíritu Santo y nacido de la virgen María, que fue crucificado, sepultado y resucitó de entre los muertos, que ascendió al cielo, y esta hoy a la diestra del padre como nuestro intercesor…

Y así es como podemos consolar a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que él nos ha dado a nosotros, porque así como los sufrimientos de CRISTO  se desbordan sobre nosotros y nosotros sufrimos con ÉL así también se desborda nuestro consuelo…

Y no contristais al ESPÍRITU SANTO...

 Efesios 4:30: Y no contristéis al ESPÍRITU SANTO de Dios, con EL cual fuisteis SELLADOS para EL día de la redención

Y bendito sea ÉL CRISTO DE LA GLORIA, PUES ESE GRAN DÍA CON EL SELLO DE DIOS, LLEGAREMOS A SU PRESEM CIA SANTA OH SEÑOR No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu. 
Vuélveme el gozo de tu salvación, Y espíritu noble me sustente.
Salmo 51:11-12

Y así poder soportar con fortaleza los sufrimientos que nosotros padecemos, porque tenemos una esperanza firme, porque cuando aceptamos a CRISTO y nuestro arrepentimiento es genuino, ordenado por DIOS para todos y es necesario para el perdón de los pecados…

 Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados.
Is 57:15

Porque la justificación, la regeneración y el nuevo nacimiento se efectúa por fe en la sangre de JESUCRISTO, santificación subsecuente al nuevo nacimiento, por medio de la palabra y de su Santo Espíritu, 

Hechos 15:11

 Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de igual modo que ellos.