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« Pabellon Grecia: Guardia en el Santuario Ateniense
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De: angeluz14 (Mensaje original) |
Enviado: 17/11/2009 18:38 |
*Desde hacia días las cosas en el Santuario se han vuelto turbias, haciendo sentir en el aire incertidumbre entre los guardias. Se filtraban rumores entre las partes bajas de la tierra ateniense, como si en alguna parte oscura u oculta enemigos no proclamados de la diosa Atenea estuviesen maquinando un plan maquiavelico para hacerse de su vida y de la paz del mundo. Un grupo de soldados se encuentran entre las rocas de la entrada al santuario, observando los alrededores. No eran menos de ocho hombres, que formaban una division de grupos los cuales murmuran entre ellos secretos de miedos que comienzan a aflorar. Como si el miedo se manifestase en la naturaleza humana, uno de los mismos soldados explica el por qué de esa sensacion de abandono.
Soldado Lisandro: Nosotros solo sabemos que Atenea gobierna esta tierra pero, hay cosas que se escuchan de boca en boca ¿saben? Y se habla de otros seres que podrian ser más poderosos que la misma Atenea... Soldado Eliseo: ¿Que cosas dices? Solo son cuentos que usan los maestros para asustar a sus discipulos y hacer que se entrenen... Soldado Lisandro:... lo que he escuchado proviene de la boca de un caballero dorado...
Con esa afirmacion, todos los presentes hacen silencio y observan con seriedad a quien habla, el cual, mirando a su alrededor para asegurarse que no hay una voz superior capaz de reprenderle, continua con aquellos rumores que llegaron a sus oidos. El soldado Lisandro, quien era uno de los encargados de las guardias en la zona baja del Santuario respira profundo, señal de que aquellas palabras que se han escapado de alguna boca desprevenida han dejado de ser rumor para volverse posibilidad. -Dicen que los dioses del Inframundo y de los mares se estan armando para azotar la tierra de Atenea - habla de manera imprudente, mientras manifiesta el miedo que le cubre su ser - Es por eso que ultimamente los caballeros y amazonas doradas se encuentran haciendo guardia en lugar de los caballeros de bronce- Tal afirmacion es cierta puesto que ultimamente el sistema del santuario se ha modificado para evitar cualquier anomalia dentro del mismo. El soldado Eliseo apreta los labios como si fuese a decir algo pero, desvia la mirada levemente antes de soltar la afirmacion. Sus camaradas lo notan y lo alientan a hablar pero él aun niega, tomando en cuenta que no hay veracidad en dichos y tratando se mantenerse prudente antes de afirmar algo. -Yo tambien he escuchado algo pero ...- aspira aire y se dispone a comenzar a explicar - No se muy bien pero hay un caballero que conoce las tierras heladas del norte...- Uno de los soldados le interrumpe - ¿Degel de acuario?- pero la negativa de Eliseo no se hace esperar - Un caballero de plata...comentó a uno de los guardianes que una energia extraña ha invadido las tierras del norte, y que Atenea sabia eso y temia que representase un peligro para el santuario-. El silencio se vuelve a apoderar del absurdo grupo de guardias, los cuales demuestran poca capacidad de mantener la calma al crear antes de tiempo profecias apocalipticas - El Supremo Patriarca es invencible, no podran llegar al santuario... - exclama uno tratando de mantener el buen humor pero, al instante replica - Pero para llegar al patriarca deben pasar por nosotros...- con estas palabras un silencio de ultratumba de apodera del grupo, que sin darse cuenta es escuchado por una amazona que se alza vigilante de la entrada del Santuario, comprendiendo asi por que razón habian ordenado que un manto dorado protegiese esa zona. Los cabellos violetas de la amazona se mecen en el viento, mientras su casco se encuentra comodamente acomodado en su antebrazo derecho, mientras su espalda reposa sobre una roca y sus ojos carmesies observan al grupo sin ser vista - ...¿Y son estos los valientes aspirantes a caballeros? - se pregunta para si misma mientras sonrie con gracia mientras aquel grupo continua su vigilia en silencio, para no alertar a los superiores acerca de sus pensamientos catastroficos*
Rol Off: Este mensaje es el inicio de una cronica ateniense en la cual puede aparecer cualquier personaje que lo desee, ya que de haber un ataque en este sitio, no se llega siquiera a las 12 casas. La base esta en el grupo de soldados que comienzan a escuchar rumores que se "filtran" en el santuario acerca de un ataque inminente. Consideré que teniendo en cuenta que de ser Atenea y haber... cambios notorios entre los enemigos o señal de amenaza, se recurrió a que los dorados, tambien hiciesen guardia para asegurarse que todo estuviese en orden. Quien se quiera sumar, puede hacerlo, la razon de esta cronica es dar una actividad normal dentro del santuario. No hay reglas en el mismo, si alguien quiere entrar y comenzar a mover soldados puede hacerlo, o algun caballero de bronce o plata que no este siendo utilizado por algun roler, claro que en este caso su papel solo seria secundario. Como mencioné antes la idea es dar movimiento a Grecia. Un saludo
LC « Auseth De Escorpion - Jules ολυμπία
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"Tras la quinta o sexta picadura todos han muerto o han empezado a suplicarme que les perdone la vida" |
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*Los conflictos no se hacen esperar mientras los soldados , presa del temor de los rumores y ademas, de ser sorprendidos en tal estado comienzan a acusarse unos a otros de cobardia. De cualquier forma, Auseth no era la unica que se encuentra al tanto de las habladurias dentro del santuario, puesto que el viento trae una presencia familiar y calma de quien protege la primer casa de Aries, demostrando, quizas, que escuchaba con total naturalidad y decepcion las charlas malintencionadsa de muchos, llevados por el miedo y la insensatez. Es entonces que Lisandro amenaza a su compañero, un soldado de menor rango pero alto espiritu, convencido de que la causa del despertar de Shion de aries era una lengua indiscreta, pero, Goou le responde con sabiduria , sabiendo que las palabras del grupo habian sido escuchadas antes por una figura que se mescla con las sombras, estando como centinela vigilante de la entrada, la cual no escapó ni un segundo de sus ojos carmesies - El miedo hace que los hombres saquen lo peor de si mismos - responde la dama a las palabras de aquel soldado mientras los demas le miran contrariados y aterrados, puesto que los caballeros de la octava casa eran reconocidos por ser impiadosos más nunca injustos. Poniendose de pie, seguida por su capa color marmol la cual se mece con la brisa de la noche, Auseth lanza una mirada inquisidora al grupo causandoles verguenza y temor puesto que una mujer mostraba más fortaleza y capacidad de ser llamada guardiana que ellos mismos. El soldado Lisandro comienza a temblar mientras trata de disculparse por las palabras proferidas pero la mirada destructiva no iba hacia él, sino hacia aquel que habia proferido que los enemigos que quisiesen llegar a su Ilustrisima debian primero pasar por encima de ellos y eso les causaba pesar. El entrecejo de la amazona se frunce mientras sus ojos se vuelven agudos y amenazantes, hablando con voz de mando, potente y suprema, notoriamente molesta - Ustedes ni siquiera merecen ser escudo de su Ilustrisima, deberian besar el suelo que pisan sus pies y ni eso merecen - exclama. Los soldados comienzan a alejarse de ella puesto que la energia que emana de su ser se hace notoria, desfilando destellos dorados a su alrededor, amenazando a aquellos infieles, puesto que si bien ella no los atacaria, no dudaria en hacerles tragar palabras tan carentes de honor. Pero es cuando siente la esencia de Aries que su cosmos se equilibra de nuevo, brillando aun y vibrando de tal forma que emana su energia hacia él -¿ Shion?... ¿tu tambien crees las necias palabras que escapan de la boca de los infieles?- se pregunta puesto que tal emanacion ,capaz de salir de su recinto al lemuriano no debia ser cualquier cosa, como ella pensaba.
LC « Auseth De Escorpion - Jules ολυμπία
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"Tras la quinta o sexta picadura todos han muerto o han empezado a suplicarme que les perdone la vida" |
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De: EnLLeL |
Enviado: 20/11/2009 18:13 |
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** El primer reciento parecia responder a los vocablos que la escorpioniana relevaba al viento, a lo cual con velocidad este se armonisaba con el nivel de cosmos energia que auseth reservaba en su cuerpo haciendo que el fulgor de la primera entrada al santuario se desvanesca lentamente dejando solamente el blanco marfil como muda respuesta un silencio desolador interrumpia ese lugar a lo cual los soldados aprovecharon aquel extasis de atencion para salir corriendo en direccion de la villa y asi poder expiar por sus culpas y descansar un momento antes de buscar clemencia por sus lenguas a lo cual con velocidad goou saltaba de aquel desfiladero hacia el pabellon principal que uno al santuario con el suelo greco a las faldas de la imponente montaña y asi descansar su cuerpo en medio de la calle vacia
Soldado Goou - Cobardes !!!! vuelvan .... -
denunciaria con velocidad alzando su diestra en seña de fastidio y enojo hacia aquellos que huyen de una forma despavorida de ese lugar, por lo cual simplemente permanecia inerte en aquella posicion dando la espalda a la casa de aries y asi mismo su semblante mosraba melancolia mientras agachaba su craneo al frente y bajaba su brazo que sin animo desmontaba a las alturas para litiguear con fuerza a su costado diestro chocando con su propia cadera cual si a el mismo asotaran las palabras de aquellos y asi mismo la presencia de una dorada en la entrada del santuario
Soldado Goou - señorita auseth... puede ser cierto .... que nuestros aliados sean nuestros propios enemigos... por que usted permanece con la guardia en este paraje si se supone aun no tenemos noticias del enemigo -
divulgaba aquel soldado de minimo rango puesto la sola reaccion de la casa del carnero parecia haberle preocupado en gran medida, mientras la sola esencia de auseth en aquella localidad parecia infundir una constrictora fuerza en su pecho, un sentimiento de histeria y nerviosismo, una crisis de temperamento y fuerza espiritual, su cuerpo parecia sumirse mas y mas en la tristeza y desesperacion al no saber que pasara, al estar enfrente de una amazona dorada quien se dice nunca dejan sus porticos a menos que sea una medida urgente
Soldado Goou - digame amazona de escorpion... por favor... tan solo digame que su presencia en este lugar tan solo es casualidad... por favor -
su voz parecia cortarse cual dolorosa falanje sutilmente viajaba en el aire, mientras el chochar de cristalinas gotas caian en el suelo reflejo de la desesperacion que guardaba aquel soldado que mas que nada mostraba ira contra si mismo por lo debil que se sentia, cerrando con tanta fuerza sus puños que el linaje carmesi de sus entrañas dejaba aflorar, puesto la impotencia en su cuerpo no le dejaba existir en paz **
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E.r.S. Ariessu No Shion ProTecToR DeL PriMeR PorTiCo AtHeNiEnSe " La Soledad es mi Refugio, Las Sombras son mi Manto y la Muerte... Mi Descanso "
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*-¿Alianzas dices?- Menciona en replica a la respuesta del santo visitante. Divaga unos momentos, pensando en los caballeros nordicos, fantaseando respecto a sus cualidades como guerreros y el desafio que podrian presentar al escorpion; sus aptitudes como presas dignas. -¿No te emociona, Degel?- desvio su vista hasta los ojos del Acuariano, mirandole por el rabillo de su mirada -Este calor, ¿acaso no lo puedes sentir? ¿No arde tu corazon ante la emocion de una batalla contra dos dioses?-. Un fuerte viento soplo, moviendo la larga y espesa cabellera azulada del Escorpion, agitando sus cabellos danzantes, cubriendo parte de su rostro, ocultando su mirada. Alzo su zurda, agitandola en el aire, negando tales palabras, apartandole la vista y cerrando sus ojos. Bufo con expresion soberbia -No, no, ¿que cosas digo?. Es imposible que alguien como tu pueda comprender una sensacion asi. Aunque, algunas veces desearia que asi fuese, en tal caso... ¡si podrias sentir esta fiebre por una batalla!- Movio rapidamente su diestra, lanzando una veloz estocada directo al rostro del onceavo caballero, deteniendose a centimetros antes de siquiera rozarlo -¡Tu si serias un verdadero reto!. ¿Verdad que si, Degel?- Sonrio arrogante, con expresion pretenciosa, incitando a su compañero a una batalla, aunque tenia claro que trucos asi y provocasiones de tal nivel, lamentablemente, no tendrian efecto en alterar siquiera en lo mas minimo al Gelido dorado. -¿Y que asuntos te han traido hasta aca abajo?, es curioso que abandones tus libros por tanto tiempo-.*
« Kardia de Escorpion »
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*-Emocion? - piensa ante la inevitable algarabia que se apodera de su hermano de armas, tratando de decodificar el por que de tanta felicidad de su parte. No manifiesta una respuesta pero, esta era predecible para cualquiera puesto que el caballero de acuario no amaba las batallas, más no se negaba a las mismas, sino que preferia la pasion por el conocimiento y la sabiduria que cultiva el espiritu. La brisa que penetra por la entrada del octavo templo mueve la larga capa que cubre la armadura dorada acuariana , mientras verdosos hilos de su larga melena se extienden paralelas sin importunar o crear el menor gesto en las facciones del caballero, cuya paz puede considerarse imperturbable. Su mirar se manifiesta helado como la piel del mismo al tacto, viendo aquello que los ojos no alcanzan a ver en la lejania. Mueve lentamente su cabeza para observar a quien cuestiona su forma de ver las cosas, puesto que Kardia siente una pasion por la pelea que para Degel es entendible, más no asi comprensible. Y es entonces que con un reves fugaz la mano del escorpion señala en acto sorpresivo directamente el rostro del caballero helado para amenazar un daño que no hace nada por detener, pues sabe que no acercara su uña orgullosa a la sangre de un hermano que no le ha provocado. Kardia puede ser impulsivo pero el honor es más importante que la vida misma para él, razon por la cual el helado caballero le respeta a pesar de todo. Degel analiza entonces los vocablos que salen de su boca y por su parte, su rostro se mantiene sereno y sin inmutacion alguna, mientras la brisa ingresa de nuevo al templo, acechando y prediciendo las razones verdaderas que han hecho que el caballero de acuario visite el octavo panteon ateniense - He recibido una orden de la diosa Atena. Justo ahora me dirigo a Asgard, que se encuentra en la tierra del norte y queria que me acompañaras - *
Degel de Acuario
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*El viento de la tarde da un alarido simultaneo apenas la pregunta ahogada de guardia Goou escapa de garganta, como si le costase mucho reprimir aquella sensacion de cruel incertidumbre a la cual los caballeros ultimamente se encuentran sometidos. La mirada de la amazona deciende levemente desde lo alto de las rocas, donde observa con calma hacia el horizonte incierto. Aspira el aire que envuelve , turbio como pocas veces, y centra sus ojos carmesies en aquel joven guardian - No lo se...- responde con total calma, puesto que en verdad no tenia idea del por qué de los cambios que se han dado ultimamente en el santuario greco - No creas que no he escuchado los rumores que recorren las paredes de cada templo desde aries, hasta piscis pero... a decir verdad no tengo idea de donde han salido...- responde con ambos brazos paralelos a su cuerpo, mientras el casco de su armadura descansa sobre el antebrazo derecho, dejando su larga cabellera suelta, la cual el viento despeina suavemente - De ser asi Goou... ¿Huirias como los demas? - pregunta tan certera, mientras los bellos ojos de la dama miran al guardian, que no puede ocultar el miedo de una guerra proxima, la cual, no solo los rumores apañan, sino el sexto sentido de cada caballero, que siente a flor de piel el movimiento de energias que se da del otro lado del mundo*
LC « Auseth De Escorpion - Jules ολυμπία
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"Tras la quinta o sexta picadura todos han muerto o han empezado a suplicarme que les perdone la vida" |
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** El brillo del astro solar se hace permanente en el atardecer greco, dando luz a todo aquello en lo que su luminicidad alcanza fulminante y ardiente ante los campos y colinas que se extienden por toda la tierra, en las lejanias de toda poblacion el santuario atheniense se alza sin declinar ante cualquier amenaza que ose adentrar a ella sin antes luchar. Varias construcciones de tamaños colosales se figuran ascendiendo hasta un recinto en el que se dice vive la protectora de toda la Tierra.En lo alto de la 5ta cumbre se alza una casa sin igual a las otras escondiendo una fuerza descomunal y capaz de desgarrar lo que sea; postrando dos enormes leones en toda la entrada en la que culminan las escalinatas perfectamente trabajadas en piedra caliza se denota en el fondo aquel paternon, escondiendo a un guerrero desconocido y del cual muy pocos han logrado escapar de sus manos, el pasillo se extienden ante la puerta hueca de la misma, llenandose de sombras a medida que la luz ya desaparecia en la lejania dejando un solo rayo, sumergido en la oscuridad aquel caballero felino posa tranquilo en posicion de meditacion con sus ojos abiertos entrenando su mirada, a la vez que un aura transparente pero potente le rodea como si fuera un campo de fuerza descargando chispas electricas de vez en cuando, sus ropajes ni su figura se logran distinguir en tanta tiniebla, mas aquel que se dice es el mas fuerte de los 12 yace concentrado en superarse a el mismo con sus limites maximos.Una leve brisa de la tarde sopla en el valle, entrando en ese instante una corriente fresca que respira con profundidad y exhala armoniosamente ..-"que tranquilidad"-.. piensa logrando escuchar gracias a su super adaptacion a sus sentidos el chirrido y canto de las aves que gozan de su plena libertad en los jardines aledaños al coliseo, el caballero leonida volviendo en si regresa a su mente aquellos extensos entrenamientos con su maestro Sishypus, y en ese instante crea una interrogacion ante cuales caballeros se encuentran cuidando cada una de las 12 gloriosas casas**
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De: EnLLeL |
Enviado: 22/11/2009 09:21 |
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** La atmosfera a la entrada del santuario pareca abrumarse y hacerse tensa, pesada y asfixiante puesto destrozaba los corazones debiles, deborando el honor y fuerza de voluntad de quienes juraron resguardar la pasividad que la tierra debe conllevar, mas las palabras de auseth parecian golpear el orgullo de aquel lemuriano que rapidamente alza la mirada al firmamento dejando correr la fuerza de su espirtu por su ser, haciendo retumbar del suelo mismo puesto su porte y dignidad habian sido retados por las palabras de la amazona de escorpio, a lo cual con velocidad devolvia su ser hacia aquella elite dorada que ahonda en porte y fuerza al calmar con sumo porte
Soldado Goou - Claro que no, mi vida y alma son para servir a athenea, solo a ella... SI MI MUERTE CUIDA LA PAZ Y EL AMOR DE ESTA TIERRA CON GUSTO LO HARE -
siendo de esa forma desbordada la energia del soldado razo del templo de athena cuyo cosmo irradia una luz grisacea cual golpea los acantilados que dan entrada hacia la casa de aries, mientras su mirada orgullosa y digna quien miraba retadoramente a la octava amazona siendo distinguida su presencia y porte al fulgurado por aquellos santos de bronce, mas rapidamente otra voz parecia responderle, orgullosa y capaz, cual retumbaba con magna presencia entre los acantilados proviniendo esta a espaldas de la misma auseth
- Buena respuesta soldado... eres digno de confianza y porte dentro de las circundadas al santuario ! -
aclaraba aquel ente que en un az de luces y destellos dejaba ver su cuerpo materealizado, cual dispersos esbirros estelares se conforman uno con el otro creando asi la figura de un varonil envuelto en doradas corazas, quien sonriente muentras un semblante palido cual es semi envuelto entre cabellos verdaceos que obscurecen su identidad mas aquella voz y el par de enormes cuernos que reposan en sus hombros declaran su identidad, al igual que el par de puntos moraseos que sobresalen de su frente, siendo la presencia del primer guardian
- que haces por aqui auseth... hacia mucho tiempo que no te veia... al parecer mis sentidos no me engañaban, la presencia de un santo dorado era notoria en estos lares -
promulgaba sonriente el primer guardian que a espaldas de la amazona se demostraba inerte siendo reflejado en los orbes de este la silueta de aquella dama de largos capilares moraseos que paresen equilibrase con el matiz de shion que calmado se presentaba, mas era abruptamente cortado por la reaccion de aquel soldado que con velocidad replegaba su cuerpo al suelo en forma de respeto, mientras dictaba desde esa postura
Soldado Goou - Shion sama !, no soy digno de esas palabras -
aclamaba la voz del soldado desde el suelo postrando sus rodillas contra el suelo inclinando el rostro hacia el suelo, a lo cual shion solo sonrio y divulgo con sinceridad las palabras que hacen retumbar en eco con todas los vacios que dejan los enormes acantilados
- esta bien soldado... te las has ganado al demostrar aquella postura... ahora auseth aclarame... de que rumores hablas... -
cladica tranquilo, mientras el soldado sudando frio permanecia inamovible manteniendoce atento a un enorme acontecimiento el cual es la coincidencia de 2 santos dorados reunidos en el mismo lugar **
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E.r.S. Ariessu No Shion ProTecToR DeL PriMeR PorTiCo AtHeNiEnSe " La Soledad es mi Refugio, Las Sombras son mi Manto y la Muerte... Mi Descanso "
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*Abre sus ojos en amplia sorpresa, mirandole con cierta estupefaccion, ante la peticion del caballero de acuario. -¿Acompañarte a Asgard?- replico luego de un breve silencio. Desvio su mirada, dirigiendola de vuelta al norte, cerrando sus ojos y llevando la diestra hasta su rostro, apoyandola contra el mismo como soporte; analizando la situacion. -La verdad, tenia esperado que ellos viniesen... tener que ir a una tierra tan fria y abandonada, no es de mi interes- Se voltea, dandole la espalda a su compañero, dirigiendose con paso indiferente de vuelta al interior del octavo templo.
Dubitativo, pero con pasos muy firmes, buscando mostrar la seguridad de su decision, se cuestionaba la alternativa de siquiera el planear ir a tal lugar. Su caminar pierde paulatinamente celeridad, hasta quedar completamente detenido y agachar su mirada, observando el suelo ante el. -Habria que cruzar inmesos oceanos congelados y eternas tormentas heladas, caminar dia y noche en medio de la nada... pero, ¿y si esos rumores son ciertos?-. Lentamente alza la diestra, pocisionandola frente a su rostro, afirmando con fuerza su muñeca con la zurda. -...Nos estarian esperando guerreros de multiples bandos dispuestos a matarnos, habria tantos trofeos y, con suerte, podria encontrarme al mismo Odin...- Su cosmos se altero violentamente, en un estallido de energia frente a el, que partia las moleculas a su alrededor, y creaba intensos destellos escarlatas en su indice, mientras la uña de este mismo se desfiguraba bruscamente, adoptando una forma amenazadora, similar al letal aguijon de un escorpion, tiñiendose de un color carmesi, tan profundo e intenso como la misma sangre, que la condenada uña habia probado ya tantas veces. El calor en el ambiente se disipo por instantes, ante la respuesta del escorpion, cuyo calor natural comenzo a inundar ligeramente el lugar. -¡¡Un Dios!! ¿¡Hay un trofeo mas grande que ese!?-. Se volteo apasionado y con un fulgor despampanante en lo profundo de su mirada, buscando los ojos de Degel, apuntandole con la uña escarlata directo a su rostro. -¿¡Que esperas, Degel!?. Apresurate o los espectros ya se habran escapado para cuando lleguemos- Menciona acelerado, obviando el hecho que en aquellas palabras ya parecia dar por verdaderos los rumores. -¡Vamos!... ¿o acaso hay algo mas que deba saber?- Alza una ceja, llevando ambas manos a su cadera, esperando la respuesta del tranquilo y parsimonioso caballero de los hielos eternos.*
« Kardia de Escorpion »
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*Sabia que Kardia no estaria convencido de ir a un lugar donde el frio es extremo puesto que odia pocas cosas como el msimo pero, mientras el caballero escorpion se adentra en el recinto, sin volver la mirada al mismo ni cambiar la expresion calma de sus facciones heladas cuando menciona de manera suprema, con la voz tan firme como la postura - Se que te interesará cuando escuches este nombre... - Mueve el rostro, bajandolo apenas, cubriendo con sus parpados la mitad de sus azules ojos para mencionar finalmente -El señor de las tierras del Norte Odin -Y en ese momento KArdia comienza a ver todas aquellas posibilidades que le podian hacer hervir tanto la sangre que la nieve no le importaria en absoluto puesto que el frio cosmos de Degel fue capaz de sentir aquella tormenta de emociones que hacen que el escorpion se levante cada dia, esperando un reto digno de su grandeza -Negociaremos con la heraldo de Odin que ha estado armando su ejercito en Asgard, pero es posible que no podamos evitar una confrontacion puesto que no somos los unicos interesados en tal alianza.-. La expresion de quien es el caballero de acuario cambia de frialdad a un dejo de sorpresa, abriendo sus ojos, quedando sus pupilas en el centro de la esfera ocular, azules y agudas ante el monologo de Kardia con el cual termina por apurarlo y sin detenerse a pensar más, escepto un pensamiento fugaz hacia quien ahora quedaria protegiendo la casa de Acuario, quien a partir de esos instantes tendria en sus manos la suprema responsabilidad de proteger el onceavo templo, asi como la dama de escorpion deberia proteger el octavo; no sin antes aligerar su semblante ante las palabras de su amigo y compañero quien pinta una escena digna de los mejores artistas acerca de espectros huyendo de ellos -Espectros... ¿que huyen? - comenta en voz baja mientras camina detrás de aquel escorpiano para salir de la octava casa para comenzar el descenso por las casas restantes y asi marcharse a una atareada mision a las tierras asgarianas*
Degel de Acuario
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** La noche se ha cernido sobre el santuario ateniense, lentamente se vislumbran las estrellas en la bóveda celeste irradiando con magnifico fulgor todo bajo su cobijo. El cuarto templo zodiacal esta en completa calma, en su interior el denso aroma a muerte se ve impregnado hasta en el lugar mas recóndito...de entre las sombras y algo adormilado se denota la figura de manigoldo quien permanece acostado en un trono esculpido con extrema delicadeza. Intempestivamente de su interior empieza a brotar vapor debido al frió que se manifiesta allí, un aire diferente e inquietante se puede percibir con claridad, el caballero de cancer mas que nadie estaba acostumbrado a interactuar con energías negativas debido a sus peculiares habilidades, pero esta recientemente manifestaba no le era familiar.
Manigoldo se levanta con parsimonia bostezando adormilado, mientras estira sus falanges superiores.
- ¿ acaso un santo dorado no puede descansar con tranquilidad ? -
comenta para si mientras empieza a frotar sus manos para calentarlas un poco, se pone de pie y emprende su parsimonioso caminar hacia el exterior de su templo con un semblante despreocupado; tras haber avanzado lo suficiente se detiene en las escalinatas dirigiendo sus azuladas vistas hacia el norte.
- ¿sera posible?... mmmmm de ser así ya me hubiesen informado de un ataque al santuario, creo que debo mantener mas al tanto de lo que sucede.-
comenta mientras sonrie ampliamente; tras meditar unos minutos voltea tenuemente su cabeza dirigiendo sus vistas hacia el templo de leo tras percibir la energía que este despedia.
- hoy hay mucho movimiento en el santuario, parece que el felino nunca se cansa -
Musita tranquilamente mientras se sienta en una escalinata a las afueras de su templo, dejando reposar su cuerpo sobre sus antebrazos mientras divisa la constelación que lo protege, perdiéndose en sus pensamientos... El caballero de cancer sabe que de desarrollarse un ataque en el templo su lugar era ese, protegiendo el cuarto templo zodiacal. lo único que le inquietaba era la energía que se podía percibir aun dentro de aquel campo sagrado, la idea de un ataque desde el interior recorría su cabeza una y otra vez. **
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*La respuesta del joven soldado hace que la amazona dorada le sonriese con calidez, gesto poco comun en ella, claro que el soldado no vio tal gesto, puesto que la mirada de Auseth se encontraba firme en la entrada del Santuario. Pero en ese instante, la voz inconfundible de un santo dorado proveniente de la primera casa, hace que la dama se voltee para asegurarse que ese cosmos no es otro que el de Shion de Aries. Le habia sentido momentos antes, y eso, a diferencia de otras veces que manifestaba una paz que era capaz de calmar el espiritu más inquieto, hizo que Auseth sintiese los gritos de guerra en la lejania. El caballero de Aries rara vez se muestra entre soldados. La amazona de Escorpion rara vez actua de centinela en las puertas del santuario y rumores como los que giran en torno a las doce casas rara vez sobreviven a menos que algo de verdad hubiese en ellos - Sabia que eras tu... Tu cosmos es dificil de confundir...- menciona viendo a los ojos al joven de cabellos verdosos mientras un viento que trae restos helados provenientes de un sitio tan lejano como el mismo inframundo ingresa les recorre, haciendo que esa sensacion de incertidumbre se apoderase esta vez de la amazona, quien poco demuestra de los pensamientos que desfilan por su cabeza, escondiendo toda emocion detras de una mascara de seguridad y orgullo - ¿Acaso no sabes las nuevas ordenes de Su Ilustrisima? - pregunta llevando su mano izquierda a la cadera, mientras el sol agonizante da un brillo fugaz dorado a la armadura de escorpion, y a quien la luce con tanto orgullo - Los dorados estan cuidando los alrededores del santuario por seguridad - responde ante la primer pregunta, acerca de que hacia en esos lugares, pero, no quiso agregar que era lo que se habia dicho ni que razón se habia dado para tal orden. Pero la pregunta de Shion no se hace esperar y , bajando la cabeza de forma que sus cabellos cubren la parte de sus ojos, dibujando una sonrisa despreocupada mientras estira su mano izquierda, como queriendo palpar el viento que se levanta en señal de una calma alarmante, levanta una ceja para ver a los ojos nuevamente al guardian del primer Templo - Se dice que la Guerra Santa se acerca a pasos agigantados y el Santuario corre un grave peligro... - Goou no habia escuchado más que rumores de otros soldados, pero , las palabras de Auseth presagian lo peor que puede ocurrir, y por desgracia no se basan en habladurias, sino en las sabias palabras del Gran Patriarca. Como caballeros, o mejor dicho, como seres humanos, cuyo sexto sentido puede ser más potente que el de las personas normales, pueden notar las anomalias en el mismo aire, más aun Shion seguramente, al ser un Lemuriano o Asmita. Auseth extrañamente sentia que algo no estaba bien desde hacia dias pero, fueron las palabras del Patriarca las que pusieron las sensaciones de la amazona en vela de juicio, puesto que lo que se avecina es un suceso terrible que marcaria el cambio con sangre; la sangre de miles de caballeros peleando por la paz y la seguridad de su diosa y de la tierra misma*
LC « Auseth De Escorpion - Jules ολυμπία
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"Tras la quinta o sexta picadura todos han muerto o han empezado a suplicarme que les perdone la vida" |
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De: EnLLeL |
Enviado: 23/11/2009 08:00 |
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** Los eolos gelidos provenientes del norte mismo de la corteza terrestre provocan gran estruendo al chocar con las murallas, provocando el desgarre de estos desfiladeros correidno las rocas solidas por sus pieles expelidas cual corte fino de la montaña, pasando a los costados de aquel soldado quien mantenia su mirada erguida, sin poder tomar alguna palabra su labio, parecia haberse congelado siendo su cuerpo y mente totalmente destrozado por aquel helado aire que proviene cual augurio de penas y desolacion, destrozando la conviccion que aquel soldado demostraba antes, perdiendoce la vista de este en la silueta de aquellos dorados sujetos, sin percatarse de la enorme roca que cae en el camino debido al estruendoso viento, que agita al por mayor las tunicas de los dorados cuales capas mismas, mas aquella infame roca cae del peñazco salido al viento siendo un parte aguas de la corriente nordica, para asi amenazar la existencia de Goou, quien dictama con fuerza
Soldado Goou - Entonces verdad !!!... la guerra a comenzado... QUE HAREMOS... COMO SOBREVIVIREMOS ! ... NOS PUEDEN ATACAR SIN PREVIO AVISO... SEREMOS... SEREMOS... ASESINADOS ! -
erguia sus fuertes vociferaciones cuales gritos de histeria y locura, ademas de impotencia mientras erguia su cuerpo de aquel suelo demostrando lo degastado de su semblante ante tal descubrimiento, su alma era absorvida por la inmencidad de la incertidumbre y la necesidad de guia y esperanza en aquel encuentro fatal que relatan las historias miticas de quienes fueron testigos de la anterior guerra, anunciando asi la propia historia de un patriarca muerto, incluso de quien os ordena ahora es solo un inexperto... miles de pensamientos acuden al atormentado soldado... mas rapidamente aquel ambiente se vuelve denso, caluroso, como si el propio sol naciera en las colindanzas de aquella localidad, siendo las negras corazas del soldado detonantes de un destello dorado, una brasa portente y fulgurante cual desglosa asi en varias capas los desgastados peñascos que dan entrada al santuario, siendo la verde cabellera del primer guardian agitada al maximo, un temblor sonico y terestre arremete sobre toda la parsimonia estadia que circunda al santuario, ejendrando un cimbrar de tierra y aire cual se vuelve pesado, mientras los orbes del lemuriano dorado se clavan enla silueta de su hermano de raza, a la vez que abre su palma derecha de la cual se enjendra una presion invisible sofocante que destroza el propio aire, capaz de reducirlo a su mas minima molecula y dispersarla fuera de una asociación material cual apunta a la inminente roca cual se despedaza dejando correr los fragmentos por el aire creando una nube cafe que cubre la silueta de goou, mas no su rostro que expectante admira la belleza y poder del primer elite dorado, un magno guerrero quien cambiaba su semblante a un serio y frio, mientras las llamas de aquel cosmo sobresalen de los obeliscos atrayendo asi a varios soldados los cuales incluso al principio habian huido puesto el majestuoso ruido y el poder que se sentia alertaba a la entrada del santuario, siendo todos detenidos al admirar el cuerpo de shion desplegante de fuerza y magnificiencia, permaneciendo inmovil al lado de auseth y sin mas con fria y seria mirada aclama a todos observando sus rostros y aflijidos corazones, escuchando sus pensamientos y aceptando su tristeza, mientras los murmullos de aquellos soldados avalanzaban miles de preguntas e inquietudes a sus mentes
- es el primer santo... esta lejos de su casa !... las defensas se aumentan... la guerra viene... el poder de un dorado... podremos protejer a athena... sobreviviremos -
son las ocilaciones vocales que emplean aquellos soldados y santos de plata que acuden al acontecimiento a lo cual shion simplemente cierra sus orbes y clamando aun con su cosmo encendido y siendo admirado por goou y los demas aprovecha la atencion para dictar
- y aun tienen temores... ESTAN FRENTE A LA MAYOR FUERZA TERRESTRE, NOSOTROS SOMOS LOS SANTOS Y SOLDADOS DE LA ESPERANZA, AMOR Y FE !.... SOMOS LOS ELEGIDOS PARA DAR PROSPERIDAD A ESTA TIERRA, QUIENES CON NUESTRAS MANOS DESGARRAMOS LOS CIELOS... Y CON NUESTRAS PATADAS AGRIETAMOS LA TIERRA... LOS FIELES SERVIDORES DE ATHENEA AUN A COSTA DE NUESTRA EXISTENCIA... NUESTRA VIDA ES LO UNICO QUE POSEOS EN REALIDAD, POR QUE NO OFRENDARLA AL FUTURO DE NUESTROS HIJOS Y HERMANOS !!!... NO HAY ENEMIGO QUE DETENGA NUESTROS SUEÑOS Y ESPERANZAS... YA QUE NOSOTROS TENEMOS EL RESPALDO DE TODOS LOS ENTES VIVIENTES QUE NOS RODEAN... TODOS... tan solo sientanlo ... -
murmuraba con gran fuerza y gozo, sonriendo con mas calma y naturalidad, aquella sonrisa que refleja parsimonia y total tranqulidad, dejando asi que aquellas llamaradas se dispersen por el aire dejan correr una brisa calida y asi mismo en la mente de aquellos plateados hacer retumbar algunas oraciones y palabras de hermanos, niños, personas y familia de los servidores de grecia, dando asi los animos a estos quienes sonreian al sentir la fuerza del dorado sujeto rodearles por su ser, recordandoles por que pelean y por que vale la pena arriesgar la vida mientras le mismo shion sonrie a boca abierta y abre sus orbes reflejando la calma y esperanza de su espiritu al ser reflejada esta en los iris del dorado carnero quien acude con mayor calma
- Venga entonces hermanos... demostremos a quienes osan desafiar la paz y el amor que sus intentos son nulos e inservibles... demostremos la fuerza del santuario unido ! -
sus palabras retumbaban con fuerza en aquellos rostros que con velocidad se tornaban serios y alegres, una nueva conviccion habia nacido la fuerza de la esperanza se habia enjendrado en los corazones de aquellos soldados, incluso el mismo Goou acompañaba a la respuesta de aquellos servidores fieles del santuario
- HAI !!!! Shion sama ! -
siendo aquellos cuerpos acelerados a la brevedad en disperdigarse por la entrada del santuario asumiendo sus posiciones y trabajar con mas motivacion, y sin el miedo de sus corazones puesto en contemplar la fuerza que les apoya y asi mismo de quienes son los santos elites les brinda el sueño de sobrevivir y el deceo de pelear a sus lados, mas por la mente de unlemuriano retunbaban aquellas palabras de animo y las propias acciones de shion mientras se aleja de aquella posicon
" shion sama, parecia preocupado... ademas de que aquellas voces, mas que nada eran ecos de recuerdos... sera posible que aries nos alla... noo no no es posible... debo acatar las ordenes y demsotrar mi valor como soldado de la tierra "
siendo de esta forma que shion suspira mas tranquilo al verse como aquellos soldados emprenden sus debidas labores con mas vigor y animo, devolviendo su rostro serio y frio, preocupante de la atmosfera en la cual se desenvuelve la tierra, siendo fundidos sus orbes calmados, mas tristes en la silueta de la amazona de escorpio para asi dictar, mientras permanece de pie frente a ella dejando ondular su bata por aquella brisa que vuelve a ser gelida y frivola
- como sabras auseth, mi entrenamiento es en jamir, donde se reparan armaduras, lo cual requiere que me ausente tiempos prolongados de la casa de aries y el santuario, por lo cual no me tenia notificado tu apoyo alas circundantes de la casa de aries, mas te daras cuenta que eso es sobre estimarme... por otro lado he vuelto alterado por este sentimiento que incluso mi maestro decifro, mucho antes de que la brisa gelida arribara de asgard, se muchas cosas como tu dices por ser un lemuriano... mas quisiera saber los acontecimientos en el santuario, antes de comentar algo mas, ademas de lo que tu sabes... ya hemos quedado solos por lo que los comentarios siguientes, no afectaran a nadie mas -
culminaba tranquilo y sereno cual si todo hubiese sido parte de su plan para elevar las fuerzas grecas y asi mismo poder discutir a solas con la octava amazona los planes y sucesos que alterarian el curso de la inminente guerra santa y asi mismo de cuales eran las ideas de la misma escorpioniana, esperando frente a ella sin titubear en su postura seca y fria la respuesta y reaccion de ella **
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E.r.S. Ariessu No Shion ProTecToR DeL PriMeR PorTiCo AtHeNiEnSe " La Soledad es mi Refugio, Las Sombras son mi Manto y la Muerte... Mi Descanso "
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*Los apasionados latidos de su ardiente corazon dicataban con prestancia los firmes pasos de su acelerado caminar. La tentacion que le ofrecia Degel era irrechazable para el belicoso escorpion, que ansiaba calmar aquel anhelo de sangre por el cual clamaba su fatal uña. La gran sonrisa en su faz se desvanecio por instantes, creyendo escuchar una acotacion de parte del acuariano respecto a los espectros huyendo. -¿¡Que!? ¿Dijiste algo?- se volteo a observarle, con ambas manos en su cintura, esperandole alguna respuesta de su parte.
Acercandose a las escalinatas que conducian a la septima casa, la custodiada por el feroz tigre, Dohko de Libra; Kardia desvio ligeramente su mirada, mirando de reojo el templo del escorpion y con una amplia sonrisa picara, musito. -Lo lamento, Ausy- Recordando que con su ausencia, condenaba a su amazona homonima a permanecer en permanente vigilia, en la soledad del octavo portico. Miro a Degel y con pasos rapidos comenzo a descender por las largas y eternas escalinatas marmoleas. -Y dime, Degel, ¿que asuntos debemos tratar en Asgard?- menciona espectante, a la vez que curioso. ¿Acaso los rumores eran tan fuertes, e importantes, que era imperante enviar a dos santos de la orden dorada en tal empresa, en lugar de los guerreros plateados que usualmente tomaban esa clase de misiones?.*
Roll Off Falto Zeros y casi recreamos toda la escena del manga ¡Jaja!. Saludos Degel.
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*La mirada distante sumida en sus pensamientos profundos se posa en los ojos de su amigo para luego negar con un movimiento de su cabeza, la cual se mece de manera poco notoria pero concisa de derecha a izquierda en señal de negacion -No he dicho nada- manifiesta su voz mientras sus pasos siguen la figura del dorado escorpion, dejando a su paso un aire helado que irradia su cosmos a medida que se mece al viento que avanza pacificamente en contra de su camino. Sus ojos son semicubiertos por sus parpados los cuales dan a su rostro unas formas que demuestran la concentracion que guarda al pensar ahora en la mision que se abre ante ellos, mientras sus pasos resonantes chocan contra las escaleras que separan casa por casa, más sus pupilas se pasean hacia la imagen de Kardia cuando este le pregunta razones de aquel viaje - Asuntos diplomaticos - responde mientras los musculos de su boca se contraen apenas para permitirle sonreia apenas - No era lo que querias escuchar. Pero no sabemos la reaccion de Asgard, ni tampoco si ellos tienen una alianza con Hades y se han levantado contra el santuario por lo que debemos ir preparados para un enfrentamiento en caso de que lo hubiese- Continua caminando levantando la mirada a los cielos mientras el viento contrario lleva su cabellera hacia atras, como tratando de afirmar al caballero en la casa onceava donde se encontraria ahora su compañera de armas -No se si volveremos. Amazona de acuario, lamentaria dejarte la responsabilidad a ti sola pero, protege el onceavo templo y si no regreso a él, perdoname por someterte a tal presion- piensa por supuesto, ya que esas cosas no se dicen, solo se vuelven promesas entre hermanos y pedidos que llegan con el aire y el mismo cosmos hacia aquel que comparte las presiones autoimpuestas*
Degel de Acuario
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*Los ojos carmesies de la amazona dorada se centran en su compañero Shion, al reprender a la cobardia de los que juraron defender a Atenea, pero, mientras eleva la mirada a la ultima casa del santuario, puede sentir el por qué de tanto temor reciente. Las guerras santas eran vistas como una muerte casi segura para todos y, si bien todos aceptaban eso al convertirse en servidores de la diosa, pocos hombres estan preparados para la muerte, la cual, golpea como una roca cuando viene a buscar la vida de algun individuo. Volviendo la mirada, luego que el caballero de Aries hubo reprendido a los demas, escuchó su planteo y asintio con su cabeza - No he elegido hacer guardia aqui... Solo se que cuando yo me marche otro tomara mi lugar. Esta es la entrada principal al santuario y de aqui, a la primer casa de aries hay largo trecho - finaliza marcando la lejania donde, quizas el trecho no era tan largo pero, cualquier avance que pueda darse dentro de las tierras atenienses podria marcar una desventaja para los que peleaban por la misma - Es como Troya... en el momento en que los aqueos ingresan en la ciudad...todo se cae como un castillo de naipes... No podemos darnos el lujo de ser troya y aceptar el caballo de un enemigo ¿No te parece?... - suspira, seria como siempre, mientras levanta levemente las cejas para continuar con su platica, mientras en lo alto, una estrella en el firmamento, comienza a brillar potente, más potente que antes. Disimuladamente la amazona levanta el rostro y nota que la estrella del norte emite un brillo similar al del lucero del alba, poco comun y extrañamente perturbador en esos momentos -Asgard en otras ocasiones se ha mantenido como aliada o completamente neutral. No me preguntes por que, Shion pero, el Gran Maestro comenzó a dudar que lo fuese en este tiempo... Quizas la avaricia se apoderó de la tierra de Odin y desea extender sus dominios más alla del hielo del norte, o tal vez solo son conjeturas ... como sea, me temo que Hades no es la unica preocupacion de la diosa Atenea en estos momentos - *
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