EL DRAGON DORMIDO
El dragón duerme y sueña, sueña que es despertado, que lo han despertado los cinco sentidos en acción, que usa sus alas y que tiene la facultad de diriguir su fuego a los lugares lastimados, con el único fin de sanar y romper cadenas que atan voluntades. Sueña que su amo es un príncipe valiente y audaz que tuvo la osadía de convertirlo en su aliado; ya no es el custodia a su princesa, sino el guardián de ambos, ellos lo dirigen y el obedece. La princesa, atrajo al príncipe a su rescate con su paciencia y belleza. El príncipe, tuvo la humildad de reconocerla como princesa y en un acto de valentía la rescata, liberandose ambos. Ahora, regresan su castillo montados en el dragón. Por las noches recorren el reino los tres juntos, vigilando la prosperidad y el bienestar de sus subditos, dirigiendo el fuego del dragón a la sanación del reino. ¡Aquí vivirán felices por siempre. !
El dragón sigue soñando y sabe que algún día al despertar su sueño se hará realidad.
Gracias a mi dragón, por su paciencia.
De lo profundo de mi Ser, Cisne Plateado |