Una Escuadra y  un Compás con extraños Poderes

Se cuenta que un Masón que quería aprender de Masonería sin esfuerzo, abandonó después de un corto tiempo Su Madre Logia- . Cuando uno de sus hermanos masones llamado Sario Nosam se estaba despidiendo de él, el Masón desertor dijo: Mi Q.: H:. Sario ¡Tienes fama de poder otorgar todo el Poder Masónico en un abrir y cerrar de ojos, así instantáneamente  y, sin embargo, quieres que yo pase mucho tiempo en Logia junto con todos ustedes!

Todavía no has aprendido a aprender cómo aprender de Masonería; pero muy pronto descubrirás lo que quiero decirte”, dijo  el Masón Sario Nosam.

Aunque el  Masón desertor había anunciado se marchaba, se deslizó antes de la media noche  a escondidas tratando de observar atreves de una ranura del Templo Masónico para saber lo que Hacía y decía de él su hermano masón Sario Nosam. No pasó mucho tiempo después, esa noche de tenida, distinguió algo inusual vio  cómo el V:.H:. Sario Nosam sacaba una joya de un cofre dorado labrado. Sostuvo la joya masónica que era precisamente una Escuadra y un Compás y la alzó para que todos los QQ:.HH.: lo vieran  diciendo: Éste mis QQ:.HH:. es el receptáculo del conocimiento y el poder masónico, y no es otro que la Figura misma de la Iluminación, que los masones de todos los tiempos han valorado tanto.

Así que éste es el secreto del poder del Q:.H:. Sario Nosam pensó el Masón desertor. Terminó la Tenida, entró en el Templo Masónico mientras los demás estaban en pasos perdidos y robó lo que para él era un Poderoso  talismán capaz de otorgarle poderes y conocimientos secretos. Pero en sus manos la Escuadra y el Compás, por mucho que lo intentó e intentó, no producía ni poder ni secretos. Se llevó una amarga decepción.

Pasó un Tiempo y se estableció como fundador de una extraña secta  y consiguió miles y miles de discípulos. El decía poseer un poderoso Talismán otorgado a él por un Ser Divino y con eso reclutaba a miles y miles de bobos.

Así,  con  el apoyo del supuesto talismán, pronto descubrió  que el talismán cuando menos servía como un poderos imán para atraer multitudes, pero así mismo  intentó una y otra vez iluminarse a sí mismo con esa joya masónica, pero sin resultado alguno.

Un día estaba en el Templo de su Secta de fanáticos, después de que sus discípulos se hubieran dormido, concentrado en sus problemas, cuando de la nada un destello de Luz Violeta  apareció el Q:.H:. Sario Nosam ante él.

¡Q:.H:. Desertor!”, dijo el Q:.H:. Sario Nosam, pudiste  robarme mi Escuadra y Compás, pero no conseguir que funcionara. Podrás robar incluso el conocimiento más  secreto, pero te resultaría inútil, como le pasó al ladrón que robó los pinceles de Leonardo Da Vinci, buenos pinceles sí, pero sin  el conocimiento del pintor no harían los obras maestras deseadas, el Ladrón carecía del conocimiento Necesario.

Luego de esto el ladrón se estableció como Pintor y murió en la miseria porque no fue capaz de hacer una obra de Arte, pero, sin embargo, sí manchó  con garabatos varios muy buenos lienzos.

Pero yo tengo el talismán, y tú no”, dio el Masón desertor.

Sí, tú tienes una Escuadra y un Compás que no es un  talismán, pero yo soy la Masonería, y en eso está la diferencia dijo el Q:.H:. Sario Nosam.

Yo, con mis facultades de artesano, puedo hacer muchas más Escuadras y Compases. Tú, con lo que piensas es un talismán, no puedes convertirte en la Masonería.

¿Entonces, por qué has venido Q:.H:. Nosam?, ¿sólo para torturarme?”, gritó el Masón desertor. Vengo para decirte que si no hubieras sido tan ingenuo como para pensar que tener una cosa es lo mismo que poder ser transformado por ella, habrías estado preparado para aprender cómo aprender de la Masonería.

 Pero el  Masón desertor pensó que el  Q.: H:. Nosam sólo estaba tratando de recuperar su poderoso  talismán, y como no estaba preparado para aprender cómo aprender, decidió continuar con su reclutamiento de bobos para su cada vez más poderosa Secta.

Sus discípulos continuaron adorando fanáticamente al Masón Desertor: y sus miles de seguidores, y los miles de seguidores de sus seguidores. De hecho, los rituales que se originaron en sus incansables experimentaciones por obtener el  ansiado Poder Masónico, constituyen hoy en día la esencia de su ahora religión mundial.

Nadie podría imaginar siquiera, tan santificadas están por el tiempo estas prácticas inventadas y tan parecidas a nuestras augustas formas masónicas, que su origen se encuentra en los hechos que acabamos de relatar.

A los fanáticos dirigentes de esta fe, además se les tiene por tan venerables e infalibles, que estas creencias nunca morirán, y constantemente lazan anatemas contra nosotros los masones, a sabiendas que muchos de ellos conocen sus orígenes masónicos.

El Q:.H:. Nosam realmente existe, pero  y el ¿Desertor?, bueno desertores tenemos muchos que luego de dejarnos han hecho su propia versión de la masonería, no sólo como una religión o una secta extraña, sino también han creado partidos políticos, eso  han creado entre muchas otras cosas raras.

El Q:.H:. Nosam dejó esa caja que contenida esa joya masónica deliberadamente luego de esa tenida con el propósito explicito  de que el Desertor la tomara y la utilizara, pero tendrían algún verdadero poder esa escuadra y compás ¿usted qué opina?

Fraternalmente Vicente Alcoseri Moderador del Foro Secreto Masónico