Los Poderosos Superiores Desconocidos
Encontramos en todas las sociedades místicas tanto de Oriente y Occidente, la idea de los denominados “Superiores Desconocidos”. Decían los antiguos éstos provenían de otras dimensiones o venidos de otros plantas. Incluso ahora, estos Superiores Desconocidos, enviarían mensajes ahora por la Internet. Estos por lo regular poco vistos y contactados, pero que rigen y gobiernan el destino de la Humanidad de una u otra forma, nunca ocupan puestos de relevancia,  sino que gobiernan desde la invisibilidad. Se dice por lo que los han contactado con ellos, dicen que habitan en ciudades subterráneas dentro de la misma Tierra, no hay rito pagano o cultura antigua que no haga alusión a ellos. El fundador de la Sociedad Secreta Golden Dawn el Señor Mathers, decía haber estado en contacto con los Superiores Desconocidos. Y este escribió: Con referencia a estos Jefes Secretos a los que me refiero, y de los cuales he recibido la sabiduría del Segundo Orden que os he comunicado, no puedo deciros. Ignoro incluso sus nombres terrenales, y sólo los he visto en muy raras ocasiones en cuerpo físico. Nos encontramos físicamente en tiempos y lugares previamente fijados. En mi opinión son seres humanos que viven en esta Tierra, pero que poseen poderes terribles y sobrehumanos. Mis relaciones físicas con ellos me han enseñado lo difícil que es para un mortal, por muy avanzado que sea, aguantar su presencia. No quiero decir con ello que, en raros encuentros experimentase el efecto de la depresión física intensa que sigue a la pérdida del magnetismo. Por el contrarío, me sentía en contacto con una fuerza tan terrible, que sólo puedo compararla al efecto experimentado por alguien que se encontrado cerca de una gran dificultad para respirar. Se dice que el mismo Hitler estaba en pie en una habitación, tambaleándose y mirando a su alrededor con aire extraviado diciendo – ¡Es él, Es él! ¡Ha venido aquí! Gimiendo. Sus labios pálidos, su cara resbalaban gruesas gotas de sudor. De pronto Hitler pronuncio nombres y números sin sentido. Decían era algo espantoso par los testigos. De pronto quedo en silencio, sólo movía los labios. Los testigos del hecho trataron de controlarlo. De pronto, rugió: ¡allí, allí! ¡En el rincón! ¡Está allí! Hitler daba patadas al suelo y chillaba. Le tranquilizaron, le dieron un fuerte tranquilizante y durmió. Hitler se convirtió en enemigo de la Masonería, y fueron masones fueron paradójicamente quienes lo derrotaron.   




Fraternalmente
Vicente Alcoseri Moderador del Foro Secreto Masónico


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