ALGDGADU
STU
Dia de Muertos
VM y QQHH
A propósito del pasado 2 de noviembre, que en México se celebró el dia de “Los Muertos”, con Altares de Muertos en escuelas, iglesias, museos Casas de la Cultura, es que me propuse participar con mi “granito de arena” y les dedico este Trazado referente a como pensaba el pueblo mexicano con relación a sus muertos.
“El Mictlán”
En el Mictlán, “lugar de los muertos”, reinaban Mictlantecuhtli y Mictlancihuatl, dios y diosa de la muerte, respectivamente, ahí llegaban los difuntos que perecían por muerte natural sin que importara edad, sexo y clase.
Para poder llegar a la región de los muertos era necesario afrontar y superar una serie de pruebas:
1. Librar dos enormes sierras
2. Librar una lagartija verde, llamada Xalchitonal.
3. Evadir ocho paramos,
4. Cruzar ocho cerros
5. Atravesar el viento de navajas, o Itzehecayan
6. Y luego de cuatro años: Ayudados con un perro sin pelo de color bermejo, atravesar el río Chiconahuapan, donde los esperaban dioses de la muerte.
Las personas que se dirigían al Mictlán eran cremadas o envueltas en sábanas, los enterraban en el patio de su casa y además sacrificaban un perro para que los ayudara a librar sus próximas batallas, incluso si el que moría era de clase alta se sacrificaban esclavos para que lo acompañaran en su viaje.
La divinidad Tlaloc “Dios de la lluvia” tenia su propio cielo, al cual se le denominaba el Tlalocan, ahí llegaban los seres que habían muerto en alguna situación relacionada con el agua, ahogados, hidrópicos, de la gota o fulminados por un rayo. Este lugar era el paraíso para los aztecas, porque aseguraban que ahí había todo en
abundancia; maíz, calabaza, tomate, frijol y que había gran variedad de flores.
Las personas que iban a ir al Tlalocan eran enterradas con una semilla de bledo y ataviados como el dios Tlaloc, con papeles azules y con una vara en la mano para protegerse en el largo recorrido.
Otro cielo era destinado a los guerreros que morían en el campo de batalla, los sacrificados y a las mujeres que perecían en el parto, a este cielo lo llamaban el Tonacalli, era dedicado al sol, y se pensaba que los guerreros después de acompañar durante cuatro años al sol, se convertían en aves del más hermoso plumaje, y bajaban a la tierra para alimentarse con el néctar de las flores.
Existe otro cielo, en la religión Azteca, el Tonocuahtitlan (Árbol de los mantenimientos) a este iban los que morían en la infancia. Cuando las personas morían los vestían de acuerdo a sus condiciones o a las causas de fallecimiento; por ejemplo:
1. Un militar era ataviado como Huitzilopochtli.
2. Un mercader, como al dios Xacatecuhtli.
3. Al que moría ahogado como a Tlaloc.
4. Al que moría por abuso de octli, pulque, lo vestían como a Tezcatzoncatl.
5. Al adúltero lo vestían como a Tlazenteotl.
Es rica nuestra Cultura, y pensar que los conquistadores dijeron: “Este pueblo no tiene alma”, pero en realidad eran ellos los que no tenían alma, educación ni cultura, su ignorancia los llevo a destruir toda clase de construcciones para levantar una triste Catedral, para adorar un dios que solo estaba en sus mentes podridas.
FRATERNALMENTE
Luis Juan Muñoz Lamoneda MM
GrOr de Torreón, Coahuila, México. Año del 2012 ev